El Gobierno anunció que la Argentina no se sumará al Pacto del Futuro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El documento prevé 56 acciones para hacer frente a los inconvenientes de la época: el mantenimiento de la paz, el cambio climático y las potenciales amenazas de la inteligencia artificial. Además, genera la posibilidad de una reforma del Consejo de Seguridad, de la estructura financiera y nuevas regulaciones.
"Muchos puntos de este Pacto, con sus anexos, presentan muchas reservas, objeciones o son retardatarios de la nueva agenda de Argentina. Estos documentos se vienen trabajando desde 2022, con otro gobierno, y el actual se encontró con negociaciones avanzadas. Aún así propusimos diversas acciones constructivas que no siempre fueron tomadas en cuenta y eso nos lleva a disociarnos", aseguró la canciller, Diana Mondino, ante la ONU.
En tal sentido, la titular del Ministerio de Relaciones Exteriores detalló la postura del Gobierno libertario: "Queremos tener alas para nuestro crecimiento en libertad. Mi país reafirma su compromiso con la solución pacífica de controversias y un orden internacional, basado en reglas y valores democráticos. Queremos demostrar que la única batalla que vale la pena dar es la cultural. Mostrando que es posible la libertad y paz".
Por su parte, el secretario de Culto y Civilización, Nahuel Sotelo, en su cuenta de X celebró la determinación: "Argentina anuncia la disociación del Pacto del Futuro. En la nueva Argentina no hay lugar para agendas internacionales totalitarias". El mensaje del funcionario estuvo acompañado de una fotografía de la canciller al realizar su discurso en el organismo mundial y oficializó la postura de la Argentina.
El Gobierno no adhirió al escrito, que sí fue firmado por 193 países en Nueva York, donde se realizará la Asamblea General de la ONU. "Sentará las bases de un orden mundial sostenible, justo y pacífico para todos los pueblos y naciones", detalló el secretario general, el portugués António Guterres, en su discurso de apertura.