La ministra de Capital Humano,
Sandra Pettovello, cruzó al diputado libertario Alberto “Bertie” Benegas Lynch por sus dichos sobre la educación obligatoria, remarcó que "el Estado y la sociedad civil también forman parte de la tutela de la educación" y remarcó que el conocimiento "promueve la libertad".
A través de su cuenta de Instagram, aunque sin mercionarlo directamente, Pettovello le marcó la cancha a Benegas Lynch, luego de sus polémicas declaraciones en las que expresó que no creía en la obligatoriedad de la educación, algo que promueve la ley 1420 sancionada en 1884, durante la presidencia de Julio Argentino Roca, sino que la consideró como
“responsabilidad de los padres” en la que no debería intervenir el Estado.
“La educación obligatoria fue propuesta en el contexto del pensamiento humanista liberal justamente para promover la libertad de los menores tutelados por adultos", sostuvo el domingo en las redes la ministra de Capital Humano donde remarcó: "Esto permite que
los niños puedan educarse, ampliando sus horizontes, para desarrollar un proyecto de vida propio en el contexto de culturas cada vez más complejas, lo que vuelve imprescindible una alfabetización integral”, agregó.
En ese sentido, remarcó que “la libertad de enseñanza, hija de la libertad de conciencia, promueve que los padres sean los primeros y naturales educadores, pero e
sto no conlleva un dominio ilimitado sobre sus hijos.
El Estado y la sociedad civil también forman parte de la tutela de la educación”, expresó la ministra hoy.
Al mismo tiempo, Pettovello ratificó el mensaje del Gobierno de "adoctrinamiento ideológico" en las aulas, tras el plan para modificar los artículos 11 y 126 de la ley nacional de educación, anunciado por el vocero Manuel Adorni la semana pasada.
“Ningún agente educativo puede absolutizar su dominio formativo sobre los menores de edad”, aprovechó para resalta la ministra de Javier Milei.
Y agregó que la educación obligatoria “derivó muchas veces en el adoctrinamiento o en monopolio ideológico, pero de esto no deben seguirse falsas soluciones que caen en otros absolutismos, como el de los padres sobre los hijos”.
