04.03.2020 / Peronismo

Contundente gesto de Schiaretti que anticipa su vuelta al PJ de la mano de Alberto

Tras casi 10 años de ausencia y un meticuloso trabajo de "Wado" de Pedo, el gobernador de Córdoba ordenó que los congresales de esa provincia participen mañana del Congreso Nacional Justicialista, que se desarrollará en el microestadio de Ferro. El peronismo avanza en el armado de una lista de unidad, con todos los gobernadores en la mesa, para la conducción del partido.




El peronismo avanza en la idea de Alberto Fernández de conseguir, de cara a 2023, una estructura partidaria federal y en absoluta unidad nacional. En ese camino, después del triunfo electoral de 2019 solamente queda una figurita, tal vez la segunda más importante, por llenar: Córdoba. Por eso, la decisión del gobernador de esa provincia, Juan Schiaretti, de enviar a sus congresales al encuentro del Partido Justicialista que se realizará en el microestadio de Ferro tras casi 10 años de ausencia no sólo marca un contundete gesto al Presidente, sino también que está en marcha la vuelta de la conducción de la segunda provincia más poblada del país al PJ y su integración al Frente de Todos

Después de casi una década al margen de la actividad partidaria, Schiaretti puso en marcha el retorno de Córdoba, a través de la mesa ejecutiva Partido Justicialista provincial, con todos sus congresales al encuentro nacional del PJ. La cita es mañana, a partir de las 10, en el microestadio del club Ferro. El cónclave tiene un objetivo destacado, que tiene que ver con avanzar en las negociaciones para consensuar una lista unidad en la nueva conducción nacional y cumplir con los pasos legales en ese sentido.

Si bien el gobernador no asistirá al congreso, su habilitación, evidentemente, fue la clave para que los congresales cordobeses participen del encuentro tras nueve años de ausencia. La decisión del mandatario cordobés fue leída en el peronismo como un "mensaje de acercamiento político a la Casa Rosada” y un gesto personal hacia Fernández.

Córdoba cuenta con 84 congresales nacionales, divididos en cuatro espacios: los sectores internos que responden al gobernador Schiaretti; al espacio del ‘delasotismo’; al senador nacional Carlos Caserio y los afines al kirchnerismo.

Por las diferencias con las distintas conducciones partidarias y durante los gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner, el peronismo cordobés no participó durante casi una década de la vida partidaria del PJ nacional. Así, y con la autorización de Schiaretti, será la primera vez que los congresales de esa provincia van al encuentro nacional partidario desde 2011, cuando el entonces gobernador José Manuel De la Sota decidió replegarse por su conflicto con CFK, decisión que mantuvo años más tarde quien ahora dio un guiño a Alberto.

 
CÓMO SE GESTO LA VUELTA DE LA CONDUCCIÓN CORDOBESA AL PJ

Explicar el hecho a través de un solo factor es imposible. Si bien el habilitador, el Juan Román Riquelme de la reconciliación fue el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, hay que comenzar con los intereses particulares de Schiaretti. El gobernador debe sobrevivir políticamente en su propio pago chico, ya que afronta en abril la interna partidaria en su distrito y ya piensa en su sucesión con figuras crecientes a su alrededor, como Caserio, que tienen buena llegada en el Gobierno.



En cuanto al factor De Pedro, hay que explicar que su rol a cargo de Interior, que vincula en materia de gestión las decisiones nacional con las provinciales, tiene un fuerte correlato político. Particularmente, a "Wado" se lo vio siempre en los encuentros que Schiaretti mantuvo con el Ejecutivo nacional desde la llegada de Alberto a la Casa Rosada. 

Se sabe, además, que mantiene conversaciones políticas con el mandatario cordobés. Incluso al momento de que la estructura del PJ Córdoba prescindiera de pronunciarse en las elecciones presidenciales de octubre pasado, cuando el Frente de Todos se enfrentó a Juntos por el Cambio y lo derrotó a nivel nacional pero en ese distrito Mauricio Macri volvió a alzarse con una amplia victoria.

Si bien versiones periodísticas no confirmadas aseguran que Fernández tuvo la oferta de ser titular del PJ en persona pero la rechazó, se sabe que el devenir de esa estructura es mirado de cerca por el jefe de Estado con De Pedro -y Cristina- a su lado. Es que ni bien comience mayo deberán asumir nuevas autoridades.

Si bien el sanjuanino José Luis Gioja y el chaqueño Jorge Capitanich están anotados en esa carrera, la definición será por consenso, independientemente de quien resulte "ganador" en la Casa Rosada quieren a todos los gobernadores en la próxima mesa de conducción. Hoy, Schiaretti es el único que no está en esa foto, pero el gesto de mañana avisa que estará en la próxima imagen.

Además de estas razones políticas, no hay que olvidarse de la economía, vital para administrar una provincia tan grande como Córdoba. Schiaretti tiene una disputa con Nación heredada de tiempos del kirchnerismo pero extremada por la mala praxis de Macri, y por eso espera, a cambio de su guiño, un gesto de Fernández respecto a la deuda por más de $15 mil millones que el Estado nacional mantiene con el provincial.