Aunque parezca insólito, un supuesto funcionario de la justicia dice que quiere investigar la corrupción en la causa de las fotocopias de los cuadernos del chofer, pero no se somete a la justicia:
el fiscal federal Carlos Stornelli pegó su sexto faltazo consecutivo al llamado a indagatoria del juez federal Alejo Ramos Padilla en el expediente en el que está imputado por integrar una banda de espionaje y extorsión.
El integrante del Ministerio Público estaba convocado a las 10 por orden del magistrado de Dolores luego que la Cámara Federal de Casación Penal lo definiera como competente para investigar el caso por presunta asociación ilícita y espionaje.
Stornelli, que sigue declarado en rebeldía, faltó a todos los llamados a indagatoria y actualmente apeló el fallo de la Cámara Federal de Casación Penal sobre la competencia, con el fin que la Corte Suprema lo revoque y le saque el caso a Ramos Padilla.
La Sala II de Casación por lo pronto tiene que definir si concede ese recurso extraordinario para que el caso llegue al máximo tribunal: en caso de ser rechazado, se prevé que Ramos Padilla lo vuelva a citar.
Mientras tanto,
está en trámite un sumario administrativo a cargo de la Procuración General de la Nación en el que se evaluará la conducta de Stornelli luego de ser declarado rebelde por no asistir a los llamados a indagatoria.
El fiscal está acusado de ser partícipe de espionaje y extorsión, así como también de integrar una asociación ilícita con esos fines. Concretamente,
uno de los casos por los cuales se lo acusa es por la extorsión al empresario Pedro Etchebest, a quien el operador
judicial Marcelo D'Alessio le pidió dinero a cambio de no involucrarlo en la causa de los cuadernos, que tiene a Stornelli como uno de los fiscales.
En este caso, hay chats, fotos y videos que muestran que Stornelli se reunió con Etchebest en Pinamar el mismo día que el empresario también fue citado y se encontró con D´Alessio en el mismo lugar.
