Cuando todavía está fresco su triunfo, el único consolidado a nivel provincial que tuvo la alianza Cambiemos desde que empezaron los comicios de este año, el gobernador reelecto de Jujuy,
Gerardo Morales, culpó a la crisis económica nacional por los votos que perdió entre los comicios provinciales 2015 y los de ayer y castigó fuerte a "la teoría duranbarbista" del núcleo duro PRO que apuesta a "un balotaje" que "podría hacer que Mauricio Macri pierda en primera vuelta".
“Con la teoría duranbarbista, Mauricio Macri podría perder en primera vuelta”, disparó sin anestesia Morales en entrevistas que dio a Clarín y La Nación desde su despacho en el Palacio de Gobierno jujeño.
Consultado respecto de las chances de que Cambiemos pierda en primera vuelta a nivel nacional, el mandatario radical afirmó que "depende de la economía y de que Cambiemos no se cierre" y le pegó durísimo a lo que llamó "duranbarbismo", que en realidad engloba a la mesa chica del PRO e integra nada más y nada menos que a
Marcos Peña: "
Me parece muy temeraria y arriesgada la estrategia duranbarbista de apostar todos los caballos a la segunda vuelta. Lo hicieron en 2015 y en esa elección no ganó esa estrategia sino que perdió el kirchnerismo que llevaba
Aníbal Fernández. Por eso vuelvo a la convención radical de Gualeguaychú: había que hacer el frente más amplio posible".
En esa línea, reiteró su idea de
"sumar más peronistas", aunque aclaró que no sabe si todavía están "a tiempo". Y explicó: "Se tendría que haber trabajado antes en eso. Tal vez no se hubiera podido, pero a veces no se hacen las cosas porque se prefieren estrategias para que la elección se resuelva en la segunda vuelta. Es un riesgo, porque se podría perder en la primera vuelta si no recuperamos la iniciativa política y si la economía no se normaliza".
Morales vinculó esta cuestión con "la discusión del radicalismo y el PRO" y sostuvo que esto último debe ser "si un radical va a integrar la fórmula", y aclaró que a él no lo pone "tan tenso si alguien quisiera presentarse en una PASO".
"No me pondría tenso con eso. Prefiero que la política se mueva y que no esté estática y que haya iniciativa política. Me gustaría que fuéramos a las PASO con alguien del peronismo que acepte participar en Cambiemos o en el frente que surja", dijo, lo que llama la atención dado que se trata de un importante dirigente radical pidiendo que la interna de Cambiemos sea Macri contra un peronista.
En cuanto a la discusión sobre el aspirante a vicepresidente, pidió que "en el PRO no se cierren y que se abran (para un vice radical)"; pero aclaró que es decisión de Macri y que sus preferidos son
Ernesto Sanz y Mario Negri: "Es una decisión personal del Presidente. El radicalismo no puede imponer.
Si a mí me vienen a imponer al vicegobernador, te saco corriendo. No lo aceptaría. Es una decisión que tiene que ver con la confianza".
En las elecciones de ayer, Morales alcanzó el 43,1% de los votos, 15 puntos menos que el porcentaje obtenido en 2015, cuando se consagró gobernador con el 58% de la mano de múltiples colectoras. Los 20 puntos que creía que podría lograr como distancia respecto de su rival del PJ, Julio Ferreyra, se achicaron sólo a 11 puntos. De hecho, este último se mostró como la gran revelación electoral con un 32,5% de los votos.
La explicación de gobernador radical sobre esto es concreta y simple: la economía de Macri. "Es la realidad económica. Tiene que ver con esa situación", respondió sin rodeos Morales consultado por la merma de votos.
Finalmente, insistió con su cuestionamiento contra la ingeniería electoral PRO y le pidió a Macri retroceder con el decreto anticolectoras, de manera que no se produzca una derrota de
María Eugenia Vidal en territorio bonaerense que derive en una caída a nivel nacional.
"Se puede (ganar Nación sin ganar Buenos Aires), pero es complicado. Es el distrito más importante, por eso habría que permitirle a María Eugenia adherir a otros candidatos a presidente.
Si no le da en primera en vuelta para sacar la diferencia y vamos a un balotaje con la teoría duranbarbista, es muy arriesgado, porque se puede en primera vuelta. Mientras tanto hay que derogar el decreto que impide las colectoras", dijo, cortita y al pie.