El exintegrante de la Corte Suprema de Justicia Juan Carlos Maqueda calificó de "horrible el decreto" firmado por el presidente Javier Milei para designar a los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla en el máximo tribunal y advirtió que la maniobra "está al borde de la inconstitucionalidad".
En declaraciones a La Nación +, Maqueda afirmó: “Me pareció horrible el decreto y la actitud del Poder Ejecutivo y del Presidente, que a tres días de que comiencen las sesiones ordinarias, tome esta decisión".
"Da para el debate porque está al borde de la inconstitucionalidad", advirtió el ex miembro de la Corte.
Según expuso Maqueda, el procedimiento fue incorporado en la Constitución Nacional, en su artículo 99 inciso 19, luego de su reforma de 1860, pero con un marco “absolutamente distinto al actual”. “En aquel momento había un Congreso que funcionaba del 1 de mayo al 30 de septiembre, también era un país donde no había carreteras, ferrocarriles, entonces obviamente era necesario un instrumento de este tipo”, argumentó al respecto.
“Hoy hay un desacople entre la realidad y el decreto para lo que fue creado. No puede postergar lo que es el artículo 99 inciso 4, que es donde la Constitución reformada en el 94, establece cómo se deben elegir los miembros de la Corte”, cuestionó.
"No se trata, como ellos lo han tratado de justificar, de 'si el Congreso no lo trató el año pasado tenemos que apelar a esto'. No sé en qué lugar de la Constitución está esto, no es así. Los pliegos tienen que seguir en el Senado, se tiene que seguir dialogando y buscando acuerdos", insistió.
Maqueda también dio una detallada explicación de por qué la Corte podría rechazar el pedido de licencia extraordinaria de Lijo, que no quiere dejar su juzgado de primera instancia por el riesgo de que luego su pliego para la Corte sea rechazado y se quede sin nada.
"La decisión final siempre va a estar en manos de la Corte", dijo Maqueda luego de que la Cámara avaló ayer la licencia. "Hay que ir a la jurisprudencia de la Corte. En 1975 la Corte fijó una posición de que un juez de primera instancia que estaba en la misma situación que Lijo, había recibido por un decreto en comisión ser camarista. Pedía seguir con el cargo de juez en primera instancia y la Corte le dijo que no, que no podía mantener el cargo", detalló.
Maqueda también mencionó el caso de José Francisco Bidau, que era camarista federal y en 1962 fue designado como juez de la Corte en comisión por el entonces presidente José María Guido. Meses después, el Senado rechazó su pliego y la Corte determinó que perdiera ambos cargos.