Luego de que se conociera que cinco diputados de La Libertad Avanza visitaron al genocida condenado
Alfredo Astiz, entre otros represores,
la Asociación de Franceses desaparecidos en Argentina acompañada por Sophie Thonon-Wesfreid, abogada de las familias de franceses desaparecidos en Chile y Argentina, lanzaron un comunicado en el que denuncian la intención de liberar a quien fuera responsable de la desaparición de monjas francesas durante la última dictadura cívico-militar argentina.
Sucede, además, nada más y nada menos que en la antesala de la llegada del presidente
Javier Gerardo Milei a Francia, en el marco de su viaje para asistir a los Juegos Olímpicos y mantener un encuentro con su par
Emmanuel Macron.
La actitud negacionista por parte del gobierno libertario argentino comienza a traer consecuencias tanto en el interior de su partido, como en el exterior. La visita al penal de Ezeiza al genocida Astiz por parte de los diputados libertarios
Beltrán Benedit, Lourdes Arrieta, Alida Ferreyra, Guillermo Montenegro, y María Fernanda Araujo, generó desapego por parte de varios funcionarios quienes intentaron justificarlo como “una visita personal”.
Lo cierto es que el encuentro con el culpable de crímenes de lesa humanidad, generó un fuerte repudio internacional, particularmente proveniente de Francia. Con un comunicado titulado
“Francia no olvida”, familiares y abogados de franceses desaparecidos, repudiaron de forma categórica la visita.
Además, denunciaron que
“el verdadero propósito de esta visita fue, de hecho, asegurar a los condenados de que sus condenas serían pronto anuladas y que serían puestos en libertad”. En el escrito presentado, se destaca que, desde la asunción de Milei, tanto él como su vicepresidenta Victoria Villarruel, además de ministros y diputados de La Libertad Avanza, “alimentan la intención de liberar a los criminales condenados”.
También hacen referencia a la visita de Milei a París para disfrutar de los JJOO, pero además advierten a Macron que “hay que recordar al presidente de la República de Francia que actualmente se está llevando a cabo una investigación relativo a la desaparición, durante la dictadura argentina, de veinte ciudadanos franceses”, una dictadura a la cual el mandatario libertario argentino y su partido le tienen simpatía.
Por su parte, el ministro de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires,
Carlos Bianco, se pronunció al respecto y opinó que "peor que la visita son los WhatsApps donde Benedit dice que no fueron a visitar genocidas ni represores, sino excombatientes que libraron batallas en la lucha contra la subversión marxista" y luego en representación de todo el gobierno de Axel Kicillof afirmó que "los crímenes por los que fueron condenados Astiz y demás genocidas y represores son crímenes de lesa humanidad y por lo tanto son imprescriptibles", sentenciando la enorme diferencia con el gobierno de Milei.
"Consideramos que la democracia en Argentina avanzó en un proceso irreversible, que no tiene marcha atrás, y por lo tanto condenamos abiertamente estas visitas. Ellos tan Astiz, nosotros tan Hebe y tan Estela", concluyó.
