Tras las diversas informaciones que adelantó y se cumplieron e incluso le generaron cruces con dirigentes PRO, ahora
Luciana Salazar lanzó a través de su cuenta de Twitter una nueva bomba política que expone una nueva y sorpresiva "grieta" nada más y nada menos que entre Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, generada por el temor judicial de la gobernadora por el escándalo de los aportantes truchos de cara a su posible vuelta al llano.
Como viene ocurriendo, la modelo usó su perfil en la red social de microblogging para develar una información que podría enturbiar la ya dañada relación entre el Presidente y la gobernadora de la provincia de Buenos Aires:
"La nueva grieta. MEV presiona a MM porque no nombra al juez federal electoral en La Plata, quien deberá investigar la causa aportantes truchos, nervios de punta en la gobernacion".
Se trata de las causas sobre los irregulares aportes a la campaña electoral legislativa bonaerense de Cambiemos en 2017, que según versiones periodísticas el macrismo consiguió a través de presiones sobre la Cámara Nacional Electoral sacarlas del fuero penal para que sean trasladadas a la justicia electoral, ahora en manos del juez federal interino con competencia electoral de Buenos Aires,
Adolfo Gabino Ziulu, un magistrado con un notorio historial amarillo.
Ese cargo, en realidad, estaba vacante. La
terna con los tres candidatos a jueces que surgieron del concurso realizado en el seno del Consejo de la Magistratura para cubrir el juzgado federal platense con competencia electoral había sido elevada al Poder Ejecutivo el pasado 16 de abril, y estaba encabezada, según el orden de mérito, nada más y nada menos que por el juez Alejo Ramos Padilla, quien tiene en sus manos otro escándalo PRO como es el caso de la banda de espionaje ilegal y extorsiones.
En segundo lugar había quedado Jorge Di Lorenzo y, finalmente, tercero, Laureano Durán.
Si bien por el puntaje obtenido por sus antecedentes y el examen oral que rindió en el marco del concurso convocado por la Magistratura Ramos Padilla quedó ubicado en primer lugar,
Macri se inclinó por Durán, el peor evaluado y solicitó a mediados de junio al Senado el acuerdo para designarlo al frente del Juzgado Federal I de La Plata con competencia electoral.
La Cámara alta no avanzó desde entonces y el líder PRO no ejerció "presión" alguna para que el cargo sea confirmado por los senadores, tarea difícil y ardua en este contexto político.
En ese marco,
parece ser, como contó "Luli", que Vidal está disgustada por la inacción de su jefe político que podría dejarla en una situación frágil ante la situación de que un nuevo Congreso, con un nuevo gobierno en la Casa Rosada, deba completar el tribunal que tendrá en sus manos la investigación de los aportantes truchos.