El Defensor del Pueblo porteño, Alejandro Amor, se manifestó acerca de la reforma previsional impulsada por el Gobierno, y sostuvo que
“No debería haber ningún sueldo en la Argentina, incluido el de los jubilados, que sea menor a lo que se denomina salario mínimo vital y móvil que define el Consejo del Salario, establecido en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional”.
“Mi visión va más allá de la fórmula en debate, porque el jubilado y pensionado es un trabajador en estado pasivo que aportó toda la vida, y hoy la jubilación mínima es de 7246 pesos y el salario mínimo vital y móvil es de 8860.
La jubilación debería tener correlación inmediata con las actualizaciones paritarias”, agregó.
Amor también criticó la medida por ser “estrictamente de carácter fiscal”, al buscar la disminución del déficit en base a la nueva fórmula de actualización de los haberes:
"No se deben tomar medidas fiscales para achicar el déficit sobre las necesidades de las personas, se toman medidas sociales para la protección de ese sector”, aseguró.
En ese sentido planteó que las medidas “nunca deben ser aisladas”, sino que deben ser pensadas en conjunto y de manera gradual para que impacten lo menor posible sobre la sociedad. "Tiene que haber política de incentivo que acompañen a esta medida con los jubilados: más descuentos en los medicamentos del PAMI y más tarifa social abierta para que se incorporen jubilados y pensionados. Son un conjunto de medidas para la protección de uno de los sectores más vulnerables de la sociedad", concluyó.