A poco de la multitudinaria marcha de rechazo al beneficio del 2x1 que la Corte Suprema otorgó a un represor,
un funcionario del macrismo porteño marchó junto a Cecilia Pando el miércoles para pedir por la libertad de los genocidas detenidos, a quienes llama "presos políticos". Se trata de
Segundo Carafí, un joven
asesor del Ministerio de Desarrollo Urbano porteño pero que además milita como titular de la Juventud PRO de ese distrito bonaerense.
El funcionario bloqueó el acceso a su cuenta de Twitter. Pero antes allí había llamado
“terroristas” a los trabajadores del Ministerio de Justicia que, nucleados en ATE, protestaron contra la presencia de la defensora de represores Pando.
“Esta es la grieta. Defensores de los guerrilleros terroristas intentando frenar un pedido de justicia”, escribió.
Carafí, además, junta firmas en un
Change.org con el objetivo de presionar a la gobernadora bonarense María Eugenia Vidal -que tampoco está muy conforme con la normativa- para que derogue la ley bonaerense que incorpora el término “dictadura cívico-militar” y el número 30 mil junto a la palabra desaparecidos en actos oficiales, ya que considera que es una cuestión de “opinión”.
“Intentar callar con una ley la voz de muchos argentinos que opinan distinto a la versión popular de los últimos años que habla de ‘los 30.000 desaparecidos’ es atentar contra los valores más profundos de la República”, explica Carafí en la página de Change.org, en donde subió su petición. Y analizó:
“No es libre quien no puede opinar. No es libre quien es condenado por su opinión. No hay República en un país donde sus ciudadanos no son libres”.
En este sentido, el joven macrista que supo fotografiarse con Vidal en desembarcos que la mandataria hizo en su distrito, corrió por derecha a la gobernadora:
“Señora gobernadora, tenga la sabiduría que demanda el tema, con el mayor respeto, vete esta ley, no condene las voces de los argentinos, no condene la libertad, no sepulte los valores de la palabra. No nos gustaría que se convierta en cómplice del crimen más atroz que se le ha intentado hacer a la República”.
La carta de Carafi que acompaña la petición detalla su mirada que abona a la teoría de los dos demonios: “Más allá de que podamos estar de acuerdo o no con el Golpe de Estado del 76, la postura que hayamos tenido en ese momento, la posición que tengamos sobre los protagonistas de aquel conflicto que hoy siguen con vida, todos tenemos una opinión en común:
lo ocurrido en los años setenta es la mancha más triste, sangrienta y dolorosa de nuestra historia, y todos juntos decimos NUNCA MAS a la guerrilla (sic) y NUNCA MAS a los golpes militares”.
Carafí, además de haber festejado en las redes sociales el fallo del 2x1,
es un férreo defensor de militares como el teniente coronel Emilio Nani -un reivindicador de la primera hora de los años de plomo-, el militar que desfiló el pasado 9 de julio junto al carapintada Aldo Rico en el marco de los festejos por el 200º aniversario de la Independencia y que por estos días se encuentra detenido por delitos de lesa humanidad perpetrados en la Base Militar de Mar del Plata.
En el marco de su defensa de Nani, el joven PRO difundió una convocatoria al acto desarrollado este miércoles que denunció una “injusta persecución ideológica contra los miembros de las Fuerzas Armadas”
Carafí, que milita bajo la agrupación juvenil macrista que encabeza "Piter" Robledo, subió varias imágenes a sus cuentas en donde se lo ve con la plana mayor del PRO: desde el presidente, Mauricio Macri, a la gobernadora María Eugenia Vidal, el alcalde capitalino, Horacio Rodríguez Larreta, el embajador argentino en Uruguay, Guillermo Montenegro o la mismísima vicepresidente Gabriela Michetti. También tiene instantáneas junto a Franco Moccia, el ministro de Desarrollo Urbano, en donde trabaja como asesor desde diciembre de 2016.