Según la normativa electoral ecuatoriana, gana las elecciones quien alcance el 40% de los votos válidos, con una diferencia de 10 puntos sobre su más inmediato rival.
El resultado más reciente emitido por el Consejo Nacional Electoral se ubicaba justo en el límite: Lenín Moreno –el candidato de Rafael Correa- tenía el 39.09%, frente al 28,28% de Guillermo Lasso. Así, escrutadas el 87.2% de las mesas, por un ínfimo margen habría segunda vuelta.
El balotaje sería el próximo 2 de abril, pero resta suficiente conteo para que el oficialista alcance el umbral requerido para el triunfo en primera vuelta, según publicó Ansa. Cuando se contabilice la totalidad de los votos, se pondrá fin a la incertidumbre para saber cuál será el camino que conduzca al reemplazante del presidente Correa.
El escenario de una segunda vuelta podría complicar a quien se postula como su sucesor.