El Frente Progresistas busca reposicionarse en la escena política de cara a las elecciones de octubre (769.316 votos), ha llevado a reconformar el panorama electoral del espacio. Por esto, Hermes Binner ha decidido llevar una boleta corta para la elección general afín de obtener votos del resto del arco opositor.
Quien fuera candidato presidencial en 2011, busca ser senador nacional por la Provincia de Santa Fe. En las primarias tuvo un desempeño muy por debajo de lo esperado, quedando detrás del candidato del Frente para la Victoria, Omar Perotti y Carlos Reutemann del PRO.
Los principales referentes de las fuerzas que conforman lel espacio (GEN, Partido Socialista y Libres del Sur, entre otros) plantearon la necesidad de profundizar su estrategia en distritos como la provincia de Buenos Aires, Córdoba y Entre Ríos.
Plantearon, entre otras alternativas, la de ir tras los votos en blanco, el sumar los sufragios obtenidos en primera vuelta por el radical Ernesto Sanz y por la titular de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, y el ponerle fin a la boleta corta encabezada por Binner en Santa Fe, para que a partir de ahora esta vaya pegada a la lista de Stolbizer pero también a la de Mauricio Macri.
En el socialismo, la decisión generó polémica ya que el espacio de centroizquierda deberá explicarle a sus votantes que dejan abierta la posibildad de acompañar a Macri. Esto significaría un costo político irremediable en caso de que Binner no obtenga los votos necesarios para alcanzar una banca en el Congreso.
