El Papa es el líder máximo de la Iglesia Católica y, como tal, un actor influyente en la política mundial. Por esta razón, suelen ser pocas las veces que se pone en duda la buena fe y voluntad del Sumo Pontífice. Desde que Jorge Mario Bergoglio se convirtió en el Papa Francisco, el cristianismo ha recuperdo gran parte de sus fieles en América Latina, además es sin duda una figura trascendental para la política argentina.
Más allá del rol que ocupa, Francisco ha entablado una relación de cariño mutuo con la presidenta Cristina Kirchner y la ha recibido en cuatro ocasiones desde que ocupa su cargo en el Vaticano.
El periodista Alfredo Leuco escribió una polémica carta en la que le reprocha que reciba a la Presidenta ya que considera que una parte de la sociedad no se siente representada.
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Usted confiesa que es un pecador. Reconoce que no es Dios y por lo tanto no es perfecto. Eso me da coraje como para expresarle mi humilde disidencia con la decisión de recibir por quinta vez a Cristina Fernández de Kirchner. Soy periodista, busco la verdad aunque nunca la encuentre del todo y mi misión en la vida es contar lo que pasa o lo que creo que pasa y lo que pienso de las cosas. Sabrá usted disculpar semejante atrevimiento. Pero aquí abajo, en el fin del mundo y con los pies sobre la tierra, le cuento que una gran porción de los argentinos está molesta, disgustada o desilusionada con la nueva cita que le dió a Cristina para el 7 de junio", expresa en una de sus partes el escrito publicado en el sitio ledoymipalabra.com.
El insólito reclamo del periodista, que para cuestionar la representatividad de la mandataria y dirigirse al Papa debería evaluar cuál es su propia representativdad, conlleva el temor a que la foto pueda jugarle a favor al gobernante FpV de cara a los comicios que se aproximan.