El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, celebró este jueves el 70° aniversario de la Planta Santa Isabel de Renault, destacando su importancia como emblema de la industria automotriz, metalmecánica y autopartista, y como pilar del desarrollo productivo de la provincia y el país. En su discurso, Llaryora resaltó que "gobernar es generar trabajo" y subrayó el apoyo continuo al sector industrial como clave para sostener el empleo y el crecimiento económico.
Sin embargo, esta celebración se da a menos de un año de anuncios de despidos reflejando asi el contexto complejo para los trabajadores de la planta.En 2024, la empresa implementó un plan de retiros voluntarios, al que hasta el momento 264 trabajadores han accedido, debido a la caída en las ventas de vehículos cero kilómetro. Esta situación ha generado preocupación entre los empleados, quienes temen por la continuidad de sus puestos de trabajo en medio de un panorama económico incierto.
La fuerte disminución en la demanda de autos nuevos ha repercutido directamente en la planta de Santa Isabel, que fue parte de una expansión productiva en años anteriores. Según el sindicato Smata, la reducción de personal continuará con más retiros voluntarios, mientras que Renault ha afirmado que los trabajadores despedidos podrán ser convocados nuevamente cuando la situación económica y productiva mejore. Sin embargo, la incertidumbre sigue siendo una constante para los trabajadores, quienes enfrentan la falta de respuestas claras y el temor a nuevos despidos.
A pesar de los avances en la celebración del aniversario de la planta, la contradicción entre el mensaje de Llaryora y la difícil situación laboral refleja un desajuste entre las políticas de apoyo al sector industrial y la precarización del empleo que atraviesa a muchos de los trabajadores de la planta, dejando en evidencia un panorama de profundas tensiones en la industria automotriz de Córdoba.