El gobierno de Venezuela, a través del ministro del Interior venezolano
Diosdado Cabello, negó que la sede de la Embajada de Argentina en Caracas haya sufrido hostigamiento e intimidación como había denunciado la Cancillería argentina.
“
Javier Milei es el fascista que gobierna Argentina (...). Yo no sé a qué llama él que se está acosando a alguien en su embajada, no sé, de verdad,
desconozco de qué nos acusa ahora”, sostuvo Cabello, titular de la cartera de Interior del gobierno de Nicolás Maduro.
Durante la rueda de prensa del Partido Socialista Unido de Venezuela, el ministro del Interior venezolano, lanzó:“Que paguen la luz, que paguen los servicios,
nosotros no le vamos a regalar nada”.
También, Cabello apuntó contra María Corina Machado, la líder opositora venezolana. “
Se acabó la impunidad para la terrorista María Corina, para los terroristas que la acompañan, para los que andan generando violencia, para los que piden sanciones (de Estados Unidos contra Venezuela)”, remarcó.
El activista Pedro Urruchurtu Noselli denunció que en la tarde del sábado agentes encapuchados del Estado venezolano comenzaron a rodear la embajada argentina en Venezuela. De acuerdo al los funcionarios de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (DAET) y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) se hicieron presentes con armas largas que cortaron los accesos en la calle, a fin de intimidar a los seis opositores que están recluidos hace meses en las instalaciones diplomáticas, bajo asilo político. Urruchurtu se encuentra refugiado en la residencia diplomática argentina desde marzo.
Frente a esto, Cancillería emitió un comunicado donde apuntó: ''La República Argentina condena los actos de hostigamiento e intimidación contra las personas asiladas en la Embajada argentina en Caracas, actualmente bajo la protección diplomática del gobierno de Brasil''.
"El despliegue de efectivos armados,
el cierre de calles alrededor de nuestra Embajada y otras maniobras constituyen una perturbación de la seguridad que debe garantizarse a las sedes diplomáticas de conformidad con el derecho internacional, así como a quienes han solicitado asilo diplomático''.
En ese sentido, Cancillería argentina pidió: ''La República Argentina hace un llamado a la comunidad internacional para condenar estas prácticas y exigir los salvoconductos necesarios que permitan la salida de las personas asiladas del país. Asimismo, agradece al gobierno de Brasil por representar los intereses argentinos en Venezuela, asumiendo la protección de los locales diplomáticos, y por sus esfuerzos para garantizar la seguridad de los asilados frente al hostigamiento del régimen venezolano''.
Por último, reafirmaron ''su compromiso con la defensa de los derechos humanos, el respeto de las normas internacionales y la seguridad de quienes se encuentran en situación de asilo''.