El gobierno del presidente Javier Milei tomó una decisión drástica en respuesta a un creciente escándalo de corrupción. Este martes, Manuel Adorni, vocero presidencial, anunció el despido de Thierry Decoud, interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT). La medida llega tras la revelación de un audio en el que se escuchan conversaciones entre intermediarios que supuestamente solicitaron coimas para concretar una operación con la empresa israelí TEGI.
Según Adorni, el despido de Decoud responde a la necesidad de garantizar "transparencia absoluta" en la gestión del YCRT, aunque no se ha confirmado que el ex interventor sea directamente responsable de los pedidos de soborno. “
Cuando el presidente detecta que no hay una transparencia absoluta en la gestión hace a un lado al interventor no porque sea el responsable, pero el presidente quiere que todo se lleve con transparencia”, explicó Adorni en la conferencia de prensa.
El escándalo surgió luego de que el diario Clarín publicara que la operación de venta de carbón de baja calidad de YCRT a TEGI se vio comprometida por un pedido de dinero por parte de los intermediarios Andrés Gross y Alejandro Salemme. Estos facilitadores supuestamente intentaron recibir entre 20.000 y 30.000 dólares para que el acuerdo de venta de 30 mil toneladas de carbón, valorado en 2.1 millones de dólares, se concretara. La operación se frustró y, según la denuncia, la empresa israelí se negó a pagar la coima solicitada.
La noticia del escándalo provocó una reacción enérgica del gobierno de Santa Cruz, que repudió el "posible delito de cohecho" y exigió una investigación exhaustiva. En paralelo, la legisladora Graciela Ocaña presentó una denuncia en la Justicia contra Decoud, Gross y Salemme, señalando la necesidad de esclarecer las responsabilidades en este caso de corrupción.
La denuncia critica duramente al actual gobierno por permitir que funcionarios corruptos interfieran en negocios legítimos, resaltando que el problema radica en los funcionarios corruptos y no en las empresas estatales.
El audio filtrado, en el que Gross y Salemme negocian con Agustín Yarke, representante de TEGI, revela un intento de manipulación de la operación. Gross, en la grabación, menciona su influencia en la negociación y reconoce haber exagerado su papel. Este escándalo pone de relieve las tensiones en torno a la transparencia y la corrupción en la administración pública, mientras el gobierno de Milei enfrenta un desafío significativo para limpiar la imagen de su gestión y abordar las implicaciones de este incidente.
