La diputada maquilladora de LLA, Lilia Lemoine, generó alarma en Casa Rosada con sus recientes declaraciones y el manejo de información sensible. Aunque no preside el bloque en la Cámara Baja, su influencia dentro del espacio libertario parece superar a la de muchos de sus compañeros y, en algunos casos, incluso a la de figuras oficiales destacadas.
Lemoine dirigió sus críticas no solo hacia la vicepresidenta Victoria Villarruel sino también a uno de los principales asesores presidenciales Santiago Caputo. En sus comentarios recientes, Lemoine minimizó la influencia de Caputo, sugiriendo que su papel en el gobierno es menos significativo de lo que se ha publicitado. A pesar de la gravedad de sus afirmaciones, hubo una respuesta contundente por parte del equipo de Caputo, lo que ha avivado las especulaciones sobre la información que Lemoine podría tener.
La diputada también arremetió contra Villarruel, cuestionando su coherencia y criticando su comportamiento en público y en eventos oficiales. Lemoine publicó videos y mensajes en redes sociales que desafían a Villarruel y revelan tensiones internas dentro del oficialismo. Su ataque más reciente incluyó comentarios sobre la vice y su relación con otros políticos, como José Mayans.
Además de sus enfrentamientos públicos, Lemoine ha estado en el centro de la controversia por sus supuestos vínculos con información comprometedora sobre figuras clave dentro del gobierno y el partido. Según fuentes cercanas, Lemoine ha mostrado mensajes y documentos que podrían implicar a funcionarios en comportamientos cuestionables, generando un clima de incertidumbre y temor.
El temor de los referentes libertarios es que, si Lemoine decide filtrar esta información, podría desencadenar un escándalo mayor, afectando gravemente la estabilidad del gobierno. En particular, se ha mencionado que Lemoine tiene en su poder detalles que podrían comprometer a funcionarios importantes y a los primeros impulsores de la campaña de Milei.
