La causa por pedofilia en Misiones que tiene preso al legislador libertario Germán Kiczka y a su hermano Sebastián continúa arrojando novedades que no sólo profundizan respecto de la gravedad de la organización internacional de explotación sexual que tendrían detrás sino que además conmociona por el impacto de los hallazgos.
En diversas entrevistas que brindó este martes, la fiscal
Daniela Dupuy, a cargo de la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas (Ufedyci), reveló que
encontraron archivos de bebés recién nacidos, niños y adolescentes en los dispositivos tecnológicos incautados en los allanamientos.
Dupuy sostuvo que el diputado libertario, que supo hacer campaña con Patricia Bullrich y luego trabajar para La Libertad Avanza, y su hermano Sebastián, “están complicados” y remarcó que “no hay dudas en la investigación”.
“Nosotros siempre vemos las imágenes con mi equipo y más allá de que trabajamos hace más de 10 años en la temática, nunca dejamos de conmovernos, son realmente tremendas”, comenzó la funcionaria judicial.
Cabe recordar que los detenidos están acusados del delito de posesión y distribución de material de abuso sexual infantil, pero que la evolución de la investigación podría complicarlos aún más.
“Hablamos de una persona en Misiones, pero detrás de este legislador hay una organización internacional de explotación sexual de niños, niñas y adolescentes”, explicó Dupuy con relación a que la investigación inició en enero tras un alerta de la organización estadounidense NCMEC, la cual monitorea el tráfico de material pedófilo en redes y que involucró a 15 países.
En ese sentido, agregó que "ojalá esta organización terminara en uno (detenido)", pero precisó que "Guardianes Digitales por la Niñez es una operación más" que están "llevando hace más de 10 años”.
Detalló que en el allanamiento al diputado Kiczka se secuestraron diversos dispositivos y que, tras analizarlos, confirmaron que tenía más de 600 videos de abuso sexual infantil, entre los que había bebés recién nacidos, niños y adolescentes.
“Estoy hablando de niños entre 0 mes y 13 años, además de algunos otros que eran de 13 y 18 años”, desarrolló en los diálogos periodísticos.
La fiscal insistió en la gravedad de los delitos al señalar que cuando se habla de "explotación sexual infantil" a veces "el público no dimensiona lo que significan esas palabras", pero que están viendo "cómo adultos abusan sexualmente de niños, niñas o adolescentes”.
Dupuy explicó que con el avance de la investigación y tras el análisis exhaustivo de cada video,
se podrá saber si los hermanos Kiczka eran solo consumidores o si también produjeron el material.
En ese sentido y en cuanto a si la investigación termina en los hermanos Kiczka o podría haber algún político “fuerte” involucrado, la fiscal planteó: “Es cuestión de seguir investigando, decir de antemano que puede haber un político, yo como fiscal no lo puedo asegurar. Seguramente el juez que interviene y el investigador van a tomar todas las medidas necesarias para profundizar la investigación y llegar a donde se tiene que llegar”.