Ayer por la noche se conoció que una formación de pasajeros del Roca, que iba hacia la estación Gutiérrez, chocó a una máquina diésel que hacía maniobras en la zona. El incidente dejó un saldo de al menos 40 heridos, aunque afortunadamente ninguno de ellos de gravedad. "Siento la enorme satisfacción que Dios nos haya acompañado en este caso", dijo Aníbal Fernández, en diálogo con Casi Despierto.
Luego de conocerse el incidente, el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, despertó sospechas sobre una posible mano negra detrás del siniestro, al asegurar que "“
hay una mafia detrás de todo este tema, donde son más empresarios que sindicalistas en algunos casos, que trabajan específicamente para sus propios beneficios y no para beneficio de los derechos de sus trabajadores y de la sociedad”.
En la misma línea, al precandidato a gobernador bonaerense por el Frente para la Victoria, dijo que sigue "sin sin creer en las casualidades" y agregó: "Es un tren que iba a rumbo a la estación Gutiérrez, según los propios testigo pasó dos alarmas que se grafican con las luces rojas muy potentes, se violaron esas dos señale de peligro y colisionó contra una locomotora que hacía maniobras en Temperley", donde hoy "se presentan 52 vagones" nuevos.
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No creo en las casualidades. El 13 de junio de 2013 hubo un caso parecido y las listas se presentaba el 21. Ayer fue 7 y las listas se presentan el 20", disparó el quilmeño y añadió: "
Puede estar ligada a un montón de cosas y no solo a Randazzo, para perjudicarlo electoralmente y en otros sentidos. En buena medida es el artífice de lo que está sucediendo con los trenes y hay una parte que se resiste".