En los últimos meses, el presidente Javier Milei perdió -según una encuesta- apoyo para su batalla cultural, un bastión discursivo de su Gobierno. Poco más del 3% de los encuestados no la considera como prioridad, pero más del 50% sí le exigen a la administración libertaria la resolución de los problemas económicos del país.
La encuesta fue realizada por las consultoras Alaska y Trespuntozero, con el objetivo de "indagar sobre la evolución en la opinión pública de los debates ideológicos planteados por Javier Milei".
De acuerdo al gráfico, el 55,1% considera que el Gobierno libertario debe enfocarse prioritariamente en los problemas económicos, mientra que sólo el 3,2% en la denominada batalla cultural.
Del escaso porcentaje se desprende que la franja etaria de 30 a 49 años rechaza contundentemente la batalla cultural (5,1%), seguida de la franja "más joven" que va desde los 16 a 29 años, con el 2,7%.
Lo cierto es que el concepto de batalla cultural suele asociarse con eliminar políticas de género y derechos humanos, reducir el Estado, preparar privatizaciones y promover valores conservadores. De esta manera, se vislumbra que cada vez menos argentinos apoyan este tipo de políticas.