El impacto del escándalo generado por el lanzamiento de la criptomoneda $LIBRA promovida por el presidente Javier Milei se sintió rápidamente en el mercado financiero argentino. Las primeras horas de operaciones en la Bolsa porteña estuvieron marcadas por un fuerte desplome de las principales acciones, con retrocesos de hasta un 5%. En este contexto, los bonos y las acciones de las empresas argentinas que cotizan en la bolsa experimentaron caídas generalizadas, a pesar de que el mercado estadounidense se encontraba cerrado por el feriado del Día de los Presidentes.
Entre las acciones más castigadas en la jornada se encuentran Comercial del Plata, con una caída de 4,73%, Loma Negra (-4,21%) y Transportadora Gas del Norte (-4,33%). A su vez, IRSA, Transportadora Gas del Sur, Transener, Banco Macro y YPF también registraron descensos importantes, reflejando la pérdida de confianza por parte de los inversores en medio de la incertidumbre política y económica desatada por la crisis cripto. La falta de operaciones en Wall Street y la suspensión de la liquidación de dólares financieros en los mercados internacionales contribuyeron a que el golpe al mercado fuera aún más severo.
En el contexto de este desplome, la cotización del dólar blue también registró un importante aumento, alcanzando los $1.230 para la venta, mientras que el dólar MEP subió un 1,3%. El mercado de bonos soberanos tampoco estuvo exento de la tormenta, con los bonos cupón PBI en dólares cayendo un 6,3%, seguidos por los bonos en pesos (-4,9%) y otros papeles como los Globales 46, que cedieron un 3,7%. Este panorama refleja una creciente desconfianza en la capacidad del gobierno de Milei para manejar la economía, especialmente en lo que respecta a las políticas cambiarias y el financiamiento de proyectos.
El escándalo de $LIBRA, impulsado por la promesa de Milei de utilizar esta criptomoneda para financiar proyectos en Argentina, sufrió un fuerte golpe cuando, tras un aumento inicial de su cotización, el propio presidente aclaró en las redes sociales que "no estaba interiorizado de los pormenores del proyecto" y que, tras haberse informado, decidió "no seguir dándole difusión". Este giro en su postura no hizo más que aumentar la incertidumbre y alimentar las dudas sobre la viabilidad de las propuestas económicas de la actual gestión.