Tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca al frente del Ejecutivo norteamericano, el presidente Javier Milei se ilusiona con la idea de reflotar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos. De hecho, en los últimos días el libertario sigue los pasos del republicano, al anunciar la salida de la Argentina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y analizar el irse del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Sin embargo, la membresía argentina en el Mercosur dificulta sus planes.
En diálogo con
Política Argentina, Julieta Zelicovich, doctora en Relaciones Internacionales, consideró que es "poco probable" que Argentina y Estados Unidos firmen un acuerdo de libre comercio, tal como pretende Milei, quien sostuvo que "Argentina ha decidido volver a integrarse al mundo y para eso hay que avanzar en tratados de libre comercio, abrir la economía y el Mercosur no puede ser una traba".
Al respecto, la experta en comercio internacional explicó que los acuerdos de libre comercio son "instrumentos complejos" y que la política estadounidense ha generado "un consenso respecto de alejarse de este tipo de instrumentos". Según su perspectiva, aunque el Gobierno argentino encontrara los elementos técnicos para formalizar su intención, "la mesa política norteamericana da cuenta de un escenario adverso".
Zelicovich es doctora en Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y magíster en Relaciones Comerciales Internacionales de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF). Además, de desarrollarse como docente, es investigadora adjunta del CONICET.
- ¿Qué son los tratados de libre comercio?
- Los acuerdos de libre comercio son instrumentos complejos, de una negociación que requiere un componente tanto técnico como político sofisticado, que tuvieron su momento de auge en los años 2000, pero que a nivel global empezaron a revisarse la manera y modos de negociarlos.
- ¿Dondé está parado Estados Unidos con respecto a estos acuerdos?
- Puntualmente en los Estados Unidos se empezó a consolidar un consenso entre partidos demócratas y republicanos respecto de alejarse de este tipo de instrumentos. En los hechos,
Estados Unidos no volvió a firmar un acuerdo de libre comercio como tal desde 2012. Sí renegoció acuerdos que ya existían con algunos socios, como con México y Canadá o con Corea del Sur, o hizo pequeños acuerdos de cooperación económica, pero desde 2012 no hace nuevos acuerdos de libre comercio.
- ¿Cuántas probabilidades hay de que se concrete un acuerdo de libre comercio entre EEUU y Argentina, tal como propone el Gobierno de Javier Milei?
- Pensar que Argentina pudiera negociar con Estados Unidos un acuerdo de libre comercio, entendido como este instrumento destinado a eliminar los aranceles en el comercio y establecer disciplinas sobre la política comercial de los bienes y regulaciones también sobre los servicios, es
poco probable.
- ¿Por qué son pocas las posibilidades?
-
El eslogan de Donald Trump es ser el hombre de los aranceles. Es una política contraria a la de liberalizar el comercio de Estados Unidos. Busca proteger el mercado norteamericano y usar los instrumentos de manera discrecional y no sujeto a disciplinas. Con lo cual, aún si hubiese, y es muy complejo por la relación económica entre Argentina y Estados Unidos, una manera técnica de resolver los elementos necesarios de un acuerdo de libre comercio, la mesa política norteamericana da cuenta de un escenario adverso a este eventual instrumento.
- ¿Qué efectos tendría en estos momentos para la Argentina un hipotético acuerdo con EEUU?
- En términos de los efectos de un acuerdo de libre comercio, hoy serían muy asimétricos. El acuerdo dispondría una limitación en las medidas de política, en un contexto donde Estados Unidos está haciendo un uso cada vez más importante de subsidios y de medidas de promoción para mejorar su industria doméstica a costas del resto del mundo. Entonces,
en este momento sería abrir la puerta, atarse de manos frente a un actor que es voraz en términos de mercados y, además, frente a un actor que lo que ha demostrado, especialmente bajo el gobierno de Trump, es una cierta desidia respecto de las reglas del comercio internacional.
Por ejemplo, decidió aplicar o amenazar con aranceles para sancionar a México o a Canadá, independientemente de que con estos actores ya existe un acuerdo de libre comercio.
-
Entonces Argentina no tendría ninguna garantía con respecto al accionar norteamericano...
- No le brindaría a Argentina ninguna garantía teniendo en cuenta la discrecionalidad que tiene hoy el Ejecutivo norteamericano. En cambio, sí ataría a cualquier gobierno de Argentina de aplicar medidas respecto de los Estados Unidos porque éste hace una vigilancia estrecha de que el resto de los países cumpla los acuerdos que firman.
- ¿Existe algún otro factor que influya en acuerdos de este estilo con EEUU?
- Otro componente vinculado a la negociación de un acuerdo de libre comercio es cómo hacerlo porque Argentina integra el Mercosur y los países del Mercosur deberían negociar este acuerdo en forma de bloque. De hecho, en los años 90 se intentó negociar con Estados Unidos un acuerdo de bloque Mercosur con Norteamérica y ese acuerdo 4 más 1 fracasó. Ante eso, Argentina sugiere o desliza la posibilidad de salirse del Mercosur.
-
¿Actualmente lo ves como una posibilidad real que Argentina se vaya del Mercosur? ¿Por qué?
- Es una posibilidad que de nuevo es
poco probable porque primero el Ejecutivo no tiene la potestad de decidir la salida del Mercosur sin una autorización previa del Congreso de la Nación y segundo, una decisión de ese tono iría en desmedro de múltiples intereses económicos, sociales de la Argentina.
- ¿Cuáles serían concretamente las consecuencias?
- Impactaría negativamente en los empleos, las industrias. Realmente
no es una decisión que tenga ni sentido político, ni que ver con el interés, sino con una lectura muy ideológica y maniquea de las relaciones internacionales.