El Ministerio de Economía logró un importante avance en la reestructuración de la deuda en pesos, con un 64% de adhesión al canje de títulos que había lanzado, según informó el secretario de Finanzas, Pablo Quirno. Con este canje, el Gobierno logró despejar unos $14 billones en vencimientos que debían pagarse entre mayo y noviembre de este año, postergándolos hasta 2026. La operación, que fue diseñada para aliviar los pagos durante los meses de mayor tensión económica y política, recibió una respuesta positiva por parte de los inversores, quienes aceptaron el "premio" que el Gobierno ofreció: una tasa de rendimiento más alta de lo que se operaba en el mercado secundario antes del anuncio del canje. De esta manera, el Ejecutivo ha logrado reducir los riesgos de sobresaltos cambiarios en un contexto de incertidumbre electoral.
El canje permitió extender la vida promedio de la deuda de 0,54 a 1,51 años, al mismo tiempo que se redujo la tasa de capitalización promedio de los títulos elegibles. Esta operación es clave para el Gobierno, que busca descomprimir el calendario de vencimientos, especialmente en el período electoral, cuando los pagos podían generar presiones en los mercados financieros.
El ministro de Economía, Luis Caputo, celebró el resultado en sus redes sociales, destacando la adhesión "espectacular" que se logró. Además, el equipo económico se mostró satisfecho por los resultados, ya que este canje representa un paso importante para mantener la estabilidad económica y permitir un proceso de desinflación con crecimiento.
Cabe señalar que el canje incluyó varios tipos de bonos y letras, como Lecap, Boncer y Boncap, y el total de ofertas recibidas alcanzó casi $5 billones. De acuerdo a Ámbito, los nuevos bonos duales emitidos, que se entregarán a los inversores que ingresaron al canje, estarán indexados a la tasa de política monetaria, lo que permitirá a los tenedores recibir el rendimiento más alto entre la tasa fija o la capitalización de la tasa TAMAR.