22.01.2025 / Internacional

A diferencia de Milei, Sheinbaun llama a no “agachar la cabeza” ante los Estados Unidos de Trump

La Presidenta de México le pidió calma a los mexicanos y recordó que el republicano ya había adoptado medidas similares durante su primera presidencia. “Vamos a actuar siempre en la defensa de nuestra soberanía y nuestra independencia”, remarcaron desde el Gobierno.





A diferencia de un Javier Milei dispuesto a negociar la soberanía argentina por sus ídolos norteamericanos, México no se quedó callado frente a las propuesta antimigratorias del flamante presidente Donald Trump y ya la mandataria mexicana Claudia Sheinbaum pidió “calma” ante las diferentes medidas que anunció el republicano.

Y es que en su primer día en la Casa Blanca, Trump declaró la emergencia en la frontera, el regreso del programa Quédate en México, la amenaza de imponer aranceles y la designación de los carteles de la droga como organizaciones terroristas, entre otras medidas que regresan en línea con sus fuertes promesas antimigratorias.

“Es importante tener la cabeza fría”, señaló la mandataria en La Mañanera el martes y recordó que la mayoría son acciones que Trump ya había adoptado durante su primer mandato. “Vamos a actuar siempre en la defensa de nuestra soberanía y nuestra independencia”, afirmó Sheinbaum al pedir que se mantenga la cooperación y colaboración para enfrentar los desafíos de ambos países. En ese sentido, subrayó: "La presidenta siempre va a defender a México por encima de todo”. Sheinbaum insistió en que los decretos anunciados en Washington caen en el terreno de lo que se esperaba y de lo que México ya ha enfrentado en el pasado.

Las autoridades mexicanas, sin embargo, evitaron confrontar directamente al mandatario estadounidense.“Vamos a actuar en apoyo y solidaridad con nuestros connacionales, a las y los mexicanos que viven en Estados Unidos”, aseguró  el canciller, Juan Ramón de la Fuente, sobre las amenazas de deportaciones y remarcó: “No están solos, no van a estar solos”.

En la previa a la toma de mando oficial de Trump, el secretario de Relaciones Exteriores de México adelantó que los 53 consulados en territorio estadounidense han recibido instrucciones para proteger y brindar asistencia inmediata ante los amagos de redadas y deportaciones masivas. Ese día, por su parte, la presidenta mexicana aseveró: “México no tiene por qué agachar la cabeza”, afirmó la presidenta, al tiempo que exigió que se mantenga “un trato de iguales” en la relación bilateral.

Los cambios en el terreno migratorio han sido cruciales en la campaña de Trump. El regreso del programa conocido como Quédate en México (Protocolo de Protección Migratoria, MPP), que obliga a los solicitantes tramitar el asilo fuera de Estados Unidos, es uno de los asuntos que más preocupa a las autoridades mexicanas, así como la eliminación del programa CBP One, el sistema electrónico de asignación de citas, que amenaza con dejar en el limbo a miles de solicitantes.

Lo cierto es que el nuevo Presidente norteamericano confirmó en su discurso de toma de posesión el regreso de Quédate en México, la declaración de emergencia en la frontera y la movilización del Ejército a los Estados fronterizos para frenar los flujos migratorios, como parte de una batería de decretos (órdenes ejecutivas). “Se detendrá inmediatamente toda entrada ilegal, y comenzaremos el proceso de devolver a millones y millones de extranjeros criminales a los lugares de donde vinieron”, afirmó Trump.