El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, junto a otros referentes del kirchnerismo, expresó su fuerte repudio a las declaraciones del presidente Javier Milei dirigidas hacia la ex presidenta Cristina Kirchner y el Partido Justicialista. Durante una entrevista, Milei manifestó su deseo de poner «el último clavo al cajón del kirchnerismo», lo que generó una ola de críticas por parte de los dirigentes peronistas, quienes consideraron sus palabras como un peligro para la democracia.
EL RECHAZO UNÁNIME
El senador Eduardo «Wado» De Pedro calificó las declaraciones de Milei como «repudiables y perversas», acusándolo de fomentar la violencia contra Cristina Kirchner y desviar la atención del fracaso de su modelo económico. Mayra Mendoza, intendenta de Quilmes, también manifestó su rechazo, afirmando que lo que Milei busca enterrar es la dignidad del pueblo argentino, y señaló a Kirchner como un símbolo de esa dignidad.
LA DEMOCRACIA
Germán Martínez, presidente del bloque de Unión por la Patria en Diputados, advirtió sobre el peligro que representan estas expresiones para la democracia, instando a todas las fuerzas políticas a frenar la incitación a la violencia. Cecilia Moreau, vicepresidenta 1° de la Cámara baja, exigió al presidente una disculpa pública, recalcando la responsabilidad de Milei como líder de la nación para proteger a todos los argentinos.
Desde La Cámpora, el comunicado oficial recordó el atentado que sufrió Cristina Kirchner y criticó la insistencia del presidente en atacar a la ex mandataria. Leopoldo Moreau, por su parte, denunció que las palabras de Milei reflejan una construcción elaborada contra su enemiga política.
