El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció por vías oficiales que la Policía de la Ciudad comenzará a usar las cuestionadas pistolas Taser en las estaciones de cabecera y en las que tienen "más tráfico" de las seis líneas de subte porteñas.
Según informó el gobierno de Jorge Macri en su página, las Taser "permiten, por ejemplo, detener a delincuentes o personas que atacan con elementos cortantes o en actitudes violentas sin que corran peligro ellas o terceros". Sin embargo, no aclaró en qué situaciones se usarán en el subte estas armas que el oficialismo califica como "no letales", pero la oposición y múltiples organizaciones civiles han cuestionado por su capacidad de ejercer daño.
Al principio, se usarán en las estaciones Plaza de Mayo, San Pedrito, Miserere, Primera Junta, San José de Flores y Congreso de la Línea A; en las estaciones Juan Manuel de Rosas, Carlos Pellegrini, Federico Lacroze, Dorrego, Carlos Gardel, Pueyrredón y L.N. Além de Línea B; en Retiro, Diagonal Norte, Constitución y Avenida de Mayo de la Línea C; en Congreso de Tucumán, Carranza, Palermo, Bulnes, Pueyrredón, Agüero, Facultad de Medicina, Tribunales, 9 de Julio y Catedral de la Línea D; en Retiro, Bolívar y Plaza de los Virreyes de la Línea E, y en Facultad de Derecho, Santa Fe y Hospitales de la Línea H.
En el mismo comunicado se aclaró que, a pesar de que comenzará en esas estaciones, el número irá "incrementándose de forma gradual hasta fin de año, llegando también a incluir al Premetro".
La semana pasada, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich confirmó que la Policía Federal ya utiliza las pistolas Taser en las estaciones de tren y micros. Las Taser se usan en las cabeceras y “estaciones críticas” de las líneas de tren Roca, Sarmiento, Urquiza, Mitre, Belgrano Norte, Belgrano Sur y San Martín, así como en las Terminales de Ómnibus de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.