A tan solo dos días de asumir su cargo, el nuevo ministro de Salud, Mario Lugones, generó un fuerte revuelo al pedir la renuncia del Consejo de Administración del Hospital Garrahan. La medida se produce tras la decisión del Consejo de otorgar un bono de $500.000 a los médicos, una acción que Lugones consideró no autorizada y en desacuerdo con la pauta salarial establecida por el Estado Nacional, que prioriza la racionalización del gasto. Desde la cartera sanitaria, se argumenta que esta decisión fue tomada sin consulta ni evaluación previa, lo que provocó una ola de críticas por parte de los trabajadores del hospital.
El malestar en el Garrahan no es nuevo. Los profesionales de la salud, agrupados en la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT), ya habían llevado a cabo paros anteriores en reclamo de mejores condiciones salariales, alertando sobre la pérdida de poder adquisitivo que enfrentan. Este miércoles, los trabajadores realizaron una nueva medida de fuerza, exigiendo una recomposición del 100% en sus salarios y un salario inicial de $1.400.000. La situación se intensificará con otro paro previsto para el 8 y 9 de octubre, donde se movilizarán a la Secretaría de Trabajo.
Según detalló el Cronista, ea secretaria general de la APyT, Norma Lezana, no dudó en expresar su descontento ante la decisión de Lugones.
“Si creen que nos van a atemorizar no entendieron nada de nada y van a desatar un tsunami de indignación”, advirtió, señalando que la concepción de salud del nuevo ministro está más alineada con intereses privados que con las necesidades del sistema público. Además, criticó la disparidad entre los sueldos de los funcionarios y los salarios de los trabajadores que sostienen uno de los hospitales pediátricos más importantes de Sudamérica.
De acuerdo a mencionado medio, el clima de tensión se siente en el hospital, donde los profesionales consideran el bono de $500.000 como un paso positivo en sus reclamos, aunque demandan que se incorpore al básico. Agostina Fiandrino, médica residente, enfatizó que los aumentos han sido irrisorios en comparación con el costo de vida actual, con aumentos recientes que apenas alcanzaron el 1%.
