Todavía no empezó el verano y los mosquitos recién comienzan a llegar - antes que en años anteriores -, y
lo que fue una odisea en "temporada alta" de dengue durante el año pasado ya comienza a repetir en la primavera de 2024: no hay repelentes en ningún lado y, donde se consigue, los precios se inflan semana a semana hasta valores insólitos.
El director del Centro de Profesionales Farmacéuticos (CeProFar),
Rubén Sajem, aseguró este martes que
"no hay repelentes por ningún lado" y que, desde el conocimiento que le permite su rol en el sector, "las droguerías no tienen, se les entregó el 10% de lo solicitado".
Además del desabastecimiento del producto - que los argentinos atestiguan al ir a cualquier comercio -, el representante de los profesionales de farmacias alertó que
"los repelentes en envase de 200 centímetros cúbicos deberían venderse a $ 3500 ó $ 4000, los larga duración un poco más caros, por eso quizás no haya", pero que "aparecieron distribuidoras y revendedores con precios fuera de lugar".
"En un lugar de accesorios de moda vi un repelente en la vidriera y cuando pregunté, me pidieron $ 22.000", afirmó Sajem como ejemplo.
En cuanto a las provincias que, ante la inacción del gobierno nacional, avanzaron en la crisis del verano pasado en producciones propias, el titular de CeProFar afirmó que pese a que "el repelente está considerado un producto cosmético" y "eso facilitaría su producción", el que "produce el estado de Santa Fe no llega".
"Un repelente no tiene que salir más de cuatro mil pesos, incluso el de primera marca", insistió entrevistado en FutuRock respecto de los elevados precios que exhiben algunos comercios.
En cuanto al producto repelente más conocido, el OFF, Sajem explicó que su productor, SC Johnson, "tiene sus plantas en Argentina y Brasil, pero no dan abasto, y esta situación se va a hacer más compleja cuando empiece a hacer más calor".
"Algunas segundas y terceras marcas están complicadas para conseguir los envases, las materias primas y los componentes", advirtió adicionalmente, lo cual complica porque hay faltante de insumos.
Sajem, además, apuntó contra la falta de políticas del Poder Ejecutivo que encabeza Javier Milei: "Del Gobierno no podemos esperar ninguna regulación. Fuera de la farmacia los productos pueden costar cualquier cifra, y eso es una situación de abuso".
"No va a haber repelentes suficientes este verano como para sostener un precio lógico y adecuado", insistió, y recordó que "durante el gobierno anterior se hizo un acuerdo con Johnson para que fabrique más del Off naranja, eso es algo lógico en un brote epidémico".
Respecto de la apertura a la posibilidad de importar el producto que ensayó tardíamente el Gobierno durante el verano pasado, Sajem aseguró que "Anmat dejó de demorar los trámites de importación de repelentes" y deseó que haya "productos importados", pero aclaró que "el año pasado no aparecieron".
"Las trece mil farmacias del país no estamos consiguiendo repelente, y se están vendiendo por otro lado a precio de abuso", cerró.
CARO Y NO HAY, Y EL GOBIERNO NO RESUELVE
Durante la semana pasada se conoció que la marca número uno, ya mencionada, pasó una lista con aumentos del 7 por ciento en los precios, casi el doble del IPC promedio del INDEC.
Ante esa situación, desde la Casa Rosada reclamó a su propia Secretaria de Comercio que haga algo, según publicó Página 12, cosa que motivó que esa dependencia intente presionar al gigante SC Johnson, el dueño del 90 por ciento de la góndola y de la marca OFF, para que aumente la producción.
En el Gobierno no quieren pagar "el costo político de no tener producto" como ya les pasó el año pasado. Según marca, al día de hoy sólo algunos proveedores pymes nacionales están sosteniendo una demanda que, aún lejos del pico, ya tiene serios problemas de provisión.
Además, con el problema de falta de insumos básicos. Por ejemplo, una firma tuvo que utilizar envases de otro producto y colocarles encima etiquetas de su marca de repelente, lo cual es notorio y le significó una pérdida de confianza importante en los consumidores.
En las últimas horas, el secretario de Comercio, Pablo Lavigne, y directivos de Defensa del Consumidor recibieron a autoridades de SC Jonhson y marcaron la preocupación oficial por el desabastecimiento. Es que salvo en comercios barriales y algunas farmacias, la firma provee el grueso de producto a los comercios grandes e hipermercados nucleados en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU). Allí, lo que llega se pone a la venta y se va en segundos. "Hay efecto acopio, pero hay poco producto", cuentan. El faltante de Johnson no sólo abarca los repelentes en aerosol, sino también las variantes en crema y las tabletas marca Raid y Fuji. Lo único que se consigue, por ahora, son los espirales.
Fuentes cercanas a la empresa confirmaron a este diario que, en realidad, están produciendo el doble de lo que fabricaron en todo el año pasado. Aclararon, además, que la temporada alta del consumo solía ser entre diciembre y febrero, pero de un tiempo a esta parte se extendió de noviembre a abril. Estos datos se los hicieron llegar, además, a diferentes cámaras que nuclean comercios.
📞 Rubén Sajem en #AhoraDicen | http://Futurock.fm