La llegada de Tomás Figueroa como titular del partido libertario en Santiago del Estero, designado por Karina Milei, generó un fuerte temblor dentro de las filas libertarias. Figueroa, con un pasado en el peronismo y vínculos con el gobernador Gerardo Zamora, no ha sido bien recibido por las bases locales del partido de Milei, que ven en él a un "hombre de la casta". La controversia, lejos de ser menor, tiene repercusiones profundas en el armado político de cara a las elecciones de 2025.
El flamante presidente de La Libertad Avanza en la provincia es sobrino de José "Pepe" Figueroa, un dirigente histórico del PJ santiagueño. "Tomás Figueroa desarrolló una extensa actividad parlamentaria como asesor de múltiples referentes del peronismo del norte del país", lo que alimenta las suspicacias dentro del libertarismo local. La trayectoria del nuevo referente no es menor: pasó por cargos importantes en el Congreso, incluido un puesto estratégico en la Secretaría Parlamentaria, y hoy sigue figurando en el Senado con un salario de alto nivel.
Según Letra P, el desembarco de Figueroa ha generado fisuras en el armado provincial de Javier Milei. A las bases locales de La Libertad Avanza no les cae bien su historial peronista ni su cercanía con la gestión de Gerardo Zamora, a quien se acusa de haber sido el responsable de dividir a los libertarios en la elección de 2023. "Cada una de esas fotos irrita a la tropa libertaria santiagueña", dicen desde las bases, refiriéndose a las imágenes recientes de Figueroa junto a figuras del oficialismo provincial.
Por su parte, el gobernador Zamora, que ha sabido mantener el control de la política santiagueña con un despiece metódico del peronismo, observa cómo esta nueva grieta interna de La Libertad Avanza podría consolidar aún más su dominio. Si bien Figueroa busca competir en las elecciones de 2025, no se descarta que Zamora pueda usar esta situación a su favor para mantenerse en el poder o, en su defecto, alinear las fuerzas libertarias bajo su ala.
