Tras volver de su extensa gira por Asia y Oceanía, el Papa Francisco manifestó que aún no está definido cuándo visitará la Argentina y aclaró que "primero hay que resolver varias cosas”.
Sus declaraciones fueron tras aterrizar en el aeropuerto internacional de Fiumicino, en Roma, donde dialogó brevemente con la prensa y respondió preguntas. Entre ellas, aquellas que se referían a cuando viajará a su país. “Me gustaría ir, es mi pueblo, pero aún no está decidido”, contestó.
En el último año, el Papa manifestó en reiteradas oportunidades su deseo de volver a Argentina. Una de las últimas veces fue en enero, durante un reportaje en el Canal 9 de la capital italiana, donde aseguró que tenía intenciones de viajar en el segundo semestre de este año. Por este motivo se especuló con que septiembre podía ser una fecha tentativa para su vuelo. Sin embargo, a pesar de los supuestos, este viernes el sumo pontífice aclaró que todavía no hay precisiones sobre cuándo será.
Con respecto a Argentina, el Papa está muy pendiente de la situación social, económica y política que atraviesa el país y lo corrobora cada dirigente que lo visita en Roma. Incluso se conjeturó este año en fuentes eclesiásticas y políticas que una eventual demora en su hipotética gira por Argentina y Uruguay -así se estipuló la hoja de ruta- podía estar relacionada no solo con su salud si no con su desacuerdo sobre el plan del gobierno de La Libertad Avanza, en particular en el plano económico.
De todas maneras, Francisco tuvo un guiño particular con el presidente cuando lo recibió en audiencia privada, a solas, en el Palacio Apostólico en febrero pasado. Fue el primer mano a mano después de la batería de agresiones que el jefe de Estado argentino le dedicó durante la campaña presidencial. A pesar de eso, el Papa mantuvo con él una reunión de algo más de 60 minutos.
En los últimos meses, el vínculo entre Roma y Buenos Aires no tuvo mayores sobresaltos, pero tampoco demasiada actividad. En noviembre, la canciller Diana Mondino viajará a Italia para conmemorar con su par chileno el tratado de paz entre ambos países junto al Pontífice.