21.08.2024 / Crisis económica

Dolarización a lo Venezuela: otros supermercados aceptan el pago con dólar a cotizaciones de todo tipo

Luego de que Diarco implemente la opción de pagar con dólares a $1.400, es decir más alto que el blue, más cadenas empiezan a aceptar la divisa estadounidense ante el hundimiento del consumo. Cuáles son las cadenas, dónde están y a qué cotizaciones.




Luego de que el mayorista Diarco oficialice a principios de esta semana la opción de pagar con dólares de cualquier "cara", roto dibujado o como sea a $1.400, es decir más alto que el blue, más cadenas empiezan a aceptar la divisa estadounidense ante el hundimiento del consumo y parece iniciarse la dolarización a lo Venezuela que quiere Javier Milei

En todos los casos, la decisión de supermercados y mayoristas está anclada en que el consumo sigue hundiéndose, lejos del "rebote" de la economía del que el gobierno de Milei ve "signos". Es que las firmas buscan sumar una alternativa de pago atractiva y así incentivar las ventas.

Se configura una "dolarización" a lo Venezuela, es decir como consecuencia del empobrecimiento de la población. Curiosamente, es el deseo que surge de la idea del Gobierno de propiciar la libre competencia de monedas en el país.

La delantera en este sentido la tomó Diarco, cadena mayorista con fuerte pisada en el conurbano bonaerense, que desde el comienzo de esta semana implementó la opción de pagar con dólares a $1.400, es decir un valor más alto que el blue, que actualmente se ubica en $1.360.

El supermercado informa diariamente la cotización tanto en el sitio web como en las sucursales y permite que los consumidores puedan abonar en dólares de cara chica, cara grande, arrugados, viejos, manchados o dibujados. O sea acepta lo que venga.

Tal como informó este miércoles la agencia Noticias Argentinas, otras cadenas se empezaron a plegar, particularmente desde Rio Negro, Neuquén y Córdoba, ofreciendo sus propias cotizaciones y condiciones para la aceptación de los dólares en sus sucursales.

Los mayoristas Tehuelche, Vital y Yaguar, ubicados en las provincias sureñas, ya están recibiendo pagos en dólares, pero con algunas restricciones respecto al estado o el modelo del billete norteamericano.

El mayorista de materiales para la construcción HiperTehuelche de Neuquén acepta el pago con dólares a $1.265, pero no recibe billetes “cara chica”, ni con rayaduras o sellos, sino que deben estar en perfecto estado.

En el supermayorista Vital se toma dólares a una cotización de $960, o sea muy por debajo del blue y con un valor alineado a la divisa oficial sin impuestos, y tampoco aceptan billetes “cara chica”. La misma postura implementaron en la cadena de venta al por mayor Yaguar, pero con una cotización más cercana a la de Diarco al ubicarla en $1.390.

En Córdoba, la cadena Super Mami recibe dólares para cualquier compra a una cotización de $1.375, por encima del blue. La decisión incluye aceptar dólares “cara chica” pero no tomarán dólares dañados, rotos o pintados.

En tanto, los supermercados del Grupo Dinosaurio ya venían aceptando el pago con la divisa estadounidense desde hace un año pero la posibilidad estaba limitada a un grupo de clientes determinado.


POR QUÉ LA DOLARIZACIÓN DE MILEI ES A LO VENEZUELA

Básicamente, se trata de un proceso de libre competencia de monedas, es decir con la masivización de la aceptación de dólares para transacciones comerciales comunes, pero en el marco de un país que como la Argentina carece de dicha divisa. Es decir, se realiza sin que ingresen capitales en dólares, ya sea vía endeudamiento o elevada acumulación de reservas y desendeudamiento.

Entonces, la particularidad de esta situación es que se trata de lo que el presidente Javier Milei proyectaba cuando hablaba de desmonetización de la economía en pesos y de “remonetización” con “los dólares del colchón”.

La muy mencionada “dolarización endógena” es un proceso de empobrecimiento generalizado y a la búsqueda de medios que, a la vez, permitan mantener estándares de consumo a través de la quema de ahorros y encontrar un ancla firme en medio de un permanente tembladeral macro.