Tras la ruptura de ayer con Patricia Bullrich,
Martín Yeza, recientemente elegido como presidente de la Asamblea del PRO lanzó este viernes una advertencia para el Gobierno.
“Este es un gobierno con minoría institucional y
si nosotros tomáramos una actitud de mirarnos un poquito más a nosotros y menos al gobierno para ver cómo ayudar de una manera sana, es cierto que se podría poner peligrosa la Argentina”, sostuvo el diputado nacional en declaraciones a radio Rivadavia en medio de la tesión de Mauricio Macri, presidente del partido amarillo con el presidente Javier Milei.
Al respecto, Yeza remarcó:"Hay más interrogantes que certezas”."
Vamos viendo lo que pasa en materia de relaciones internacionales; un día nos peleamos con España, otro día decimos que Bolivia se hizo un autogolpe, que los chinos tal cosa, y es algo con lo que
no estamos de acuerdo”, apuntó el legislador. Además, apuntó a falta de iniciativa política del Gobierno que todavía no parece comenzar a usar las herramientas que le concedió recientemente el Congreso.
Macri publicó esta semana un mensaje en redes sociales para reclamarle al Gobierno que acatara el fallo de la Corte Suprema que le ordenó devolverle a CABA los fondos coparticipables que le había recortado en 2020 Alberto Fernández. Ayer el incluso el PRO rechazó públicamente una propuesta pública realizada por Milei una entrevista concedida a Jonatan Viale para confluir hacia una fusión de partidos de cara a las elecciones de 2025.
Ayer el partido finalmente se rompió durante la Asamblea para definir las autoridades, de la cual los seguidores de Bullrich se retiraron a los gritos.
“Nosotros dimos este paso no solamente para renovar al PRO, sino para pasar a un proceso de saneamiento del partido y recuperar la confianza”, dijo este viernes el también ex intendente de Pinamar.
Yeza cuestionó puntualmente a Bullrich y al exjefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta por el enfrentamiento que protagonizaron el año pasado en el marco de la primaria para definir la candidatura presidencial, los acusó de haber hecho pelear a varios dirigentes y apuntó. “Una fuerza que parecía predestinada a gobernar la Argentina, terminó tercera cómodo. E
ntonces ahora hicimos lo sensato: levantar la mano y decir que esto no va más y se empezó a hacer de una forma diferente”.
