27.06.2024 / ECONOMÍA

Por qué junio puede ser el primer mes de déficit fiscal de Milei pese a la licuadora, la motosierra y los dibujos de Toto

El aguinaldo, entre otras cuestiones, pueden marcar un antes y después para Milei. Aunque junio puede ser un punto de inflexión en materia deficitaria, el Gobierno insiste en poder mantener "el ancla fiscal".





Junio se viene con novedades. Es que el panorama fiscal argentino se prepara para un cambio importante este mes, con la estimación de que el sexto mes del año marque el primer déficit del 2024. Este giro se debe principalmente al aumento del gasto derivado del pago del aguinaldo a empleados públicos y jubilados, una carga que, según el oficialismo, compromete el equilibrio alcanzado hasta mayo.

De acuerdo a un artículo de Ámbito, algunos analistas coinciden en que el "ancla fiscal" aún se mantiene firme, respaldada por los resultados acumulados durante el primer semestre. En este sentido, creen que el presidente Javier Milei había anticipado dicho escenario a empresarios y operadores financieros, reconociendo que el mes de junio verá las cuentas públicas en rojo. Pronóstico que contrastaría con los meses anteriores, donde medidas de ajuste fiscal como la "licuadora y la motosierra" - tan elogiadas por los profetas de La Libertad Avanza - aplicadas sobre el gasto público, junto con mejoras en la recaudación fiscal, habían generado un superávit dibujado.

Veamos. Hasta mayo, el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, logró acumular un superávit fiscal de $6,5 billones y un superávit financiero de $2,3 billones. Estos números reflejan un cumplimiento por encima de las expectativas de las metas comprometidas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el primer semestre del año. Sin embargo, el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) señala que, según las proyecciones actuales, el Gobierno podría enfrentar un déficit en junio. A pesar de ello, las cifras acumuladas hasta la fecha sugieren que la meta anual sigue siendo alcanzable, lo que da margen para cierta flexibilidad fiscal en los próximos trimestres.



La entidad vinculada a la diputada de UXP Julia Strada también destacó que, a pesar del ajuste fiscal realizado, el Gobierno aún dispone de recursos suficientes para ampliar el gasto en áreas prioritarias como el aumento de ingresos para jubilados o la reactivación de la obra pública. Tal posicionamiento establece un debate sobre la dirección estratégica de la política fiscal en un contexto de necesidades económicas y sociales crecientes.



Por otra parte, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) estimó que el ajuste fiscal ejecutado hasta mayo equivalió al 5,8% del Producto Bruto Interno (PBI) anualizado. Este nivel de ajuste supera lo necesario para alcanzar un déficit cero en 2024, con un excedente estimado de 1,4 puntos del PBI según las proyecciones actuales.

El análisis del IARAF también reveló que, en términos reales, los ingresos totales efectivos cayeron un 2,6% mientras que el gasto primario disminuyó un 31,4% durante los primeros cinco meses del año. Este balance refleja un esfuerzo significativo por parte del Gobierno para controlar la expansión del gasto público y garantizar la sostenibilidad fiscal a largo plazo.

En sí, desde el punto de vista financiero, el gasto en intereses de la deuda ha experimentado una reducción del 3,4% en términos reales, contribuyendo a mejorar el resultado financiero anualizado a un nivel positivo del 1,4% del PBI. Estos indicadores contrastan con el déficit financiero registrado en 2023, subrayando la efectividad de las medidas adoptadas para estabilizar las finanzas públicas.