Con exactamente 562 días de gestión en la mochila,
Alberto Fernández pisa por primera vez Córdoba como Presidente de la Nación luego de dos portergaciones provocadas por la pandemia de coronavirus y lo hace con una nutrida agenda de gestión e inversión pública a un mes del cierre de listas y el inicio informal de la campaña electoral.
Todo el recorrido estará acompañado por el gobernador cordobés, el peronista rebelde
Juan Schiaretti, pese a las diferencias profundas que hubo por la gestión de la pandemia y el respaldo titubeante y tembloroso del bloque del dirigente de interior en Diputados. Esa tensión marcó diferencias entre el Panal y la Casa Rosada, pero la relación nunca terminó de romperse, tuvo momento de alianza, pero ahora competirían en las elecciones legislativas con un enemigo común - al menos por ahora - mayor enfrente: Juntos por el Cambio.
En concreto,
el presidente Fernández primero recorrerá la Fábrica Argentina de Aviones Brigadier San Martín (FAdeA) e inaugurará dos tramos de la Autopista Ruta Nacional 19, informaron fuentes oficiales.
La visita a FAdeA comienza a las 12, en Córdoba capital, donde entregará un avión Pampa III a la Fuerza Aérea. Acompañado por el ministro de Defensa, Agustín Rossi, y otras autoridades, el Presidente visitará pabellones de helicópteros y de aeronaves de las líneas Pampa y Hércules, para luego encabezar un acto en el que presenciará una demostración del despegue del avión Pampa III que la fábrica estatal entregará a la Fuerza Aérea.
Luego, cerca de las 13.30, el jefe de Estado inaugurará dos tramos de la Autopista RN 19 San Francisco-Córdoba (Cañada Jeanmarie-Arroyito y Arroyito-Río Primero). Lo hará en el kilómetro 226 de la citada ruta, a la altura de Camino Arroyito-Sacanta, y estará acompañado por el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis,
Esas obras tienen una extensión de 92,1 kilómetros y una inversión entre ambos tramos de casi 12.500 millones de pesos, que generaron 470 puestos de trabajo. Schiaretti estará allí en ambas actividades con Fernández, como también supo hacer con Macri cuando éste gobernaba al país.
En este contexto, y pese al alto valor que tienen las actividades de gestión ya mencionadas, esta primera visita a un territorio hostil para el kirchnerismo - que no se pudo rectificar principalmente producto de la distancia que mantuvo Schiaretti - tiene un claro contenido político y electoral:
el Frente de Todos no tiene una alianza con el peronismo cordobés del gobernado y tiene claro que los comicios de este año seguramente vayan para JXC (con el nombre que sea).
Fernández no estará acompañado solamente por funcionarios nacionales, también serán de la partida, para dar voltaje político local, legisladores de Córdoba que integran el Frente de Todos y que motorizarán el espacio oficialista en los comicios de este año. Por ejemplo, el senador nacional
Carlos Caserio (PJ) y la diputada nacional kirchnerista
Gabriela Estevez.
En las últimas elecciones, 2019, en octubre a nivel legislativo Juntos por el Cambio logró el 51,3% de los votos mientras que el Frente de Todos cosechó el 22,3% y quedó segundo. En tercer lugar se ubicó la boleta corta de Hacemos por Córdoba (el espacio de Schiaretti), con el 16,95%.
Pero en este caso las cosas son distintas para el oficialismo porque no podrá arrastrar la boleta y pone en juego un importante capital legislativo: se renuevan 9 bancas en Diputados y Córdoba es una de las ocho provincias que este turno arriesga los 3 escaños del Senado, hoy ocupados por el PRO (2) y por Caserio, que apuesta a renovar su mandato con el apoyo de Fernández.
Un acuerdo entre el Frente de Todos y Schiaretti, como el de la elección a gobernador de 2019 con el que el cordobés reeligió con el 57% de los votos, parece imposible a esta altura. Pero
una campaña en la que ambos espacios polaricen con JXC para dejar a esa como una tercera fuerza no es descabellada pese a la dificultad que presenta la misión. Siempre, con el rumor/deseo de Horacio Rodríguez Larreta de sumar al "Gringo" de cara a 2023. Pero eso está lejos aún.