27.05.2021 / Crisis

La pandemia también golpeó a los que tienen empleo: 1/3 de los trabajadores son pobres

Un informe de la UCA reveló que durante 2020 el 27,4% de los trabajadores se encuentra bajo la línea de pobreza pese a tener un empleo producto de la degradación del poder adquistivo desde 2016. De todos modos alertaron que si el año pasado no hubiera existido IFE o ATP el desempleo habría incrementado fuertemente.




El Observatorio de Deuda Social de la Univesidad Católica Argentina informó que la pandemia del Covid-19 también le pegó con dureza a los trabajadores. Según un informe durante 2020 casi un tercio de los trabajadores, el 27,4%, se encontraron bajo la línea de pobreza. 

Quienes mayor impacto sufrieron son los trabajadores marginales, los que trabajan en el conurbano y las mujeres. Más de la mitad de los ocupados se desempeñan en la informalidad, y en los últimos tres años un trabajador perdió 18,8% de poder de compra.

“Un trabajador pobre es una contradicción en sus términos. Existe la idea de que, si trabajas, no sos pobre, lo cual en Argentina no ocurre”, aseguró a Ámbito Financiero, Santiago Poy, uno de los autores del trabajo “Efectos de la Pandemia sobre la dinámica del trabajo en la Argentina Urbana”, publicado por el Observatorio de la Deuda Social de la UCA.

“Hay un fenómeno estructural de entre 15-20% de trabajadores que son pobres, pero desde 2017 comienza a agravarse. Por la inflación y la pérdida de capacidad de compra, hay un nuevo fenómeno, y es que cada vez es mayor la incidencia de trabajadores formales que son pobres”, detalló el investigador.

Según el estudio se desprende que un trabajador pobre se define si vive en un hogar pobre por ingresos, es decir, que no alcanza a cubrir la canasta básica total. La serie de la investigación comienza en 2010: ese año, el 17,7% de los trabajadores era pobre. El número bajó y para el 2015 se ubicó en 15,7%. A partir del 2016 comenzó a subir, bajó en 2017, y desde el 2018 “marcó un punto de inflexión”. Con la crisis cambiaria se disparó hasta llegar en 2019 a 27,2% y en el año de la pandemia, se mantuvo en 27,4%.

Otro punto central que también se agudizó durante el gobierno de Macri es la reducción real de sus ingresos, que entre 2017 y 2020 se estima en 18,8%, según el informe. “La estructura ocupacional no varió con los años, por lo que los aumentos que vemos también son el resultado de un fenómeno de aumento de la inflación y pérdida de poder adquisitivo”, explicó Poy. En el 2017, el 6% de los trabajadores del sector formal privado eran pobres. En el 2020 se incrementó hasta el 18,5%.

De hecho, el ingreso laboral mensual pasó de $42.828 a $33.257 en pesos constantes entre el 2010 y el 2020, por lo que en la década la pérdida del poder adquisitivo fue del 22,3%, según la UCA. Las mayores pérdidas se dieron en los sectores informales (-28,6%), luego en el sector público (-17%) y finalmente en el privado formal (-13,8%). En el sector informal, el ingreso en 2020 fue $21.475, mientras que en el privado formal fue $46.101.

Sobre las causas que explican el crecimiento de trabajadores pobres desde el 2017, Poy explicó: “Aumentan porque aumenta la pobreza en general en los hogares, pero además el mercado de trabajo es el canal transmisor, porque los trabajos no logran reunir los ingresos para que alcancen a cubrir las necesidades de consumo”, analizó.

En el 2020, el 51,1% de los trabajadores ocupados se desempeñó en la informalidad, mientras que durante toda la década ese dato nunca estuvo por debajo del 45%. Los mayores incrementos de trabajadores en hogares pobres se dieron en el conurbano (+16,7 pp), mujeres (+12,5 pp) y con secundario incompleto (+15,2 pp).

Por último destacaron las medidas económicas adoptadas por el Gobierno nacional de Alberto Fernández en la pandemia como el IFE o la Tarjeta Alimentar. Si no se hubieran llevado a cabo estas transferencias, la cantidad de trabajadores pobres hubiera trepado al 35,1%.