Parece ser que haber provocado una crisis con recesión, aumento de la pobreza y el desempleo y endeudamiento externo, la necesidad de mejorar esa situación económica y, al mismo tiempo, enfrentar una campaña electoral para intentar ser reelecto no son prioridades para el Presidente de la Nación. Es que parece ser que
Mauricio Macri se está metiendo una vez más en la política del fútbol y busca imponer un nuevo DT para la Selección Argentina de fútbol masculino en plena Copa América e incluso aunque se ganara el certamen.
El líder PRO estuvo el domingo pasado en Zurich, Suiza, para visitar la sede mayor de FIFA y allí recibir el premio Living Football Award, un reconocimiento que la FIFA entrega "a las personalidades destacadas del mundo por las acciones que han liderado para el desarrollo del fútbol y el sostenimiento de los valores del deporte como vehículo para el crecimiento de las sociedades". Según Infobae,
el mandatario usa ese tipo de reuniones, en las charlas informales, para opinar y operar sobre sus dos equipos de cabecera: Boca Juniors y la Selección.
Parece ser que el Presidente, más allá de los resultados de la Copa América por las que el equipo nacional hoy jugará en semifinales ante el local Brasil,
quiere la cabeza del actual entrenador, Lionel Scaloni, y tiene incluso en mente el nombre de un reemplazante que quiere imponer.
Se trata de un entrenador que actualmente tiene trabajo en el fútbol argentino y, para Macri, es el cree indicado para ocupar el puesto de Scaloni.
No es el Cholo Simeone. No es Mauricio Pochettino. Tampoco el Muñeco Gallardo ni el Mellizo Guillermo Barros Schelotto. En su momento, el líder PRO había postulado a Jorge Almirón, justo antes de que se lo vinculara con Boca y finalmente tomara las riendas de San Lorenzo, pero el flamante DT del Al Shabab de Arabia Saudita no es su apuntado.
El hombre en cuestión es nada más y nada menos que Gabriel Heinze, actual entrenador de Vélez Sarsfield. El ex central y lateral izquierdo de la Selección acaba de renovar su vínculo con el club de Liniers hasta fines de 2020 y está concentrado en el armado del plantel para afrontar la próxima temporada.
Según el mismo portal de noticias, se trata del hombre que Macri quiere en el combinado nacional, pero también lo tendría en carpeta Claudio Tapia, el presidente de la AFA.