Habitualmente, cuando un dirigente de un determinado espacio político es apuntado por la opinión pública por problemas de su gestión a nivel local, no suele culpar a sus superiores en la jerarquía administrativa provincial o nacional por esas problemáticas.
No es el caso de Daniel Arroyo, el intendente PRO de Mar del Plata, que acusó al gobierno nacional de su compañero Mauricio Macri como responsable ante los últimos datos del INDEC, según los cuales la ciudad costera es la de mayor desempleo del país.
"Es un problema nacional, que depende de la economía nacional, no tanto de la local", afirmó Arroyo a medios locales luego de que se diera a conocer que el nivel de desocupación de los 31 conglomerados de la provincia de Buenos Aires fue de 7,2%, mientras que el distrito con mayor índice en todo país es Mar del Plata con 9,3%.
En esa misma línea, el intendente bonaerense de Cambiemos con mayor tensión con la Provincia amplió su disparo con contundencia:
"Yo no manejo el costo del dólar, el de importaciones o exportaciones y todo eso tiene que ver con el problema de la ocupación y desocupación".
Pero no conforme con apuntar contra Macri, Arroyo además deslizó un nuevo frente de pelea con la gobernadora María Eugenia Vidal. El jefe comunal dijo que su situación es similar a la de la mandataria con respecto a la coparticipación:
"Es lo mismo que le pasa a Vidal ya que Buenos Aires produce un 45% y recibe un 15%. A nosotros nos pasa lo mismo con la Provincia: General Pueyrredón recibe sólo el 18% de lo que produce".
"Vivimos pidiendo ATN y reclamamos los fondos.
Ellos nos dan anticipos y nos han enviado dinero, pero la verdad también es que ellos no nos dan nada. Ese dinero es nuestro", disparó el intendente, que cada vez tensa más su relación con Cambiemos.
La explicación sobre la crisis de empleo en la ciudad balnearia es el
correlato de los problemas internos que atraviesa Cambiemos en el distrito, donde los radicales Vilma Baragiola y Maxi Abad también se quieren instalar como candidatos, pero la "Leona" ya lanzó a Guillermo Montenegro.
Según La Política Online, tanto Baragiola como Abad se despegaron de los tiros de Arroyo a Macri y Vidal, y apuntaron contra el pasado y la necesidad de vincularse más con los gobiernos nacional y provincial. Montenegro, por su parte, prefirió hacer silencio.
