A pesar del millonario endeudamiento aprobado por el Congreso Nacional para que el gobierno de Mauricio Macri le pague a los Fondos Buitres por la deuda argentina que adquirieron de manos de los acreedores originales,
todavía hay holdouts con los que el país no llegó a un entendimiento.
Pocos días después de cumplirse un año del pago a la mayoría de los demandantes, el diario El Cronista confirmó que
el juez norteamericano Thomas Griesa reapareció para ordenar que Argentina, Euroclear y otros 5 fondos se reúnan en la oficina del mediador Daniel Pollack para realizar un "esfuerzo" y poner fin a las negociaciones de partes.
En ese momento, el Gobierno colocó u$s 16.500 millones en bonos de hasta 30 años a una tasa promedio de 7,2, sin embargo quedan cuentas sin pagar.