En su primer viaje oficial a San Luis, territorio de los opositores Rodríguez Saá, el presidente Mauricio Macri participará de la inauguración de una planta cloacal y luego visitará un centro de jubilados de la capital puntana. El primer acto será cerrado al periodismo. El segundo, no. Así,
el mandatario se mostrará con abuelos un día después del escándalo por la baja en los aumentos a los jubilados y la marcha atrás ante el repudio generalizado.
Pero esa no será la única polémica del viaje oficial a San Luis. Hasta las últimas horas de ayer, el gobernador puntano Alberto Rodríguez Saá o había confirmado su presencia en la actividad presidencial. Desde el gobierno de Macri indicaron que el mandatario provincial fue invitado a la inauguración de la obra, realizada con fondos nacionales, que forma parte del Plan Nacional del Agua y servirá para cubrir el servicio de prácticamente toda la capital de San Luis. Sin embargo,
ni el gobernador ni su hermano, el senador Adolfo Rodríguez Saá, confirmaron asistencia.
Según señaló el diario La Nación, en la Casa Rosada ironizaban sobre la visita como una
"expedición a territorio enemigo". Sucede que el vínculo entre ambas administraciones está en su peor momento. En los últimos días, por caso, fue notorio el faltazo de funcionarios de Hacienda de San Luis a la reunión convocada por el Gobierno para discutir una nueva ley de coparticipación federal.
El jefe de Estado tenía previsto partir a las 8.15 hacia San Luis, acompañado por el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, y funcionarios de Recursos Hídricos. Allí lo esperarán el ex gobernador Claudio Poggi -ex aliado y hoy opositor al oficialismo puntano- y el diputado radical José Riccardo.
En tanto, la prensa local difundió que hubo un llamado de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al secretario general de la gobernación, Alberto Rodríguez Saá (hijo del gobernador), para coordinar el operativo de seguridad del Presidente.
El acto en la planta cloacal será cerrado al periodismo, que según confirmaron fuentes del Gobierno nacional solo podrá acceder a cubrir una visita posterior del Presidente a un centro de jubilados ubicado en Pringles al 700 de la capital provincial.
Durante la mañana de hoy, en declaraciones a una radio capitalina, el Subjefe de la Policía de San Luis -Comisario Mayor Claudio Latini- responsable del "encapsulado" y del desplazamiento de 150 efectivos provinciales afectados al operativo de seguridad, dijo que formarían parte del operativo de seguridad la custodia presidencial, la policía aeroportuaria y otras fuerzas federales.
Para completar el panorama,
en la capital puntana una veintena de organizaciones sociales y sindicales, entre ellos gremios docentes y estatales, dieron a conocer un documento donde repudian la llegada de Macri a San Luis, en el marco de un clima de protestas por el cierre de fábricas y despidos. "Repudiamos su visita, porque repudiamos sus políticas, todas, en contra de los y las trabajadoras. Sus políticas excluyen y amplían la brecha entre ricos y pobres. Su gobierno estigmatiza, reprime y disciplina a los sectores más vulnerables”, expresaron en un duro documento.
