María Eugenia Vidal intenta captar los votos de los sectores populares del conurbano bonaerense, por eso viajó en una de las formaciones de la ex Línea roca junto a Martiniano Molina (Candidato a la intendencia de Quilmes por Cambiemos). La vicejefa de la Ciudad de Buenos Aires subió una imágen a facebook en la que cuenta que le compró galletitas a un vendedor ambulante y se comprometió a visitarlo en un centro de recuperación para adictos a la droga.
"Cuando iba en el Tren Roca a Quilmes charlando con los pasajeros, vi subir a Julio con una gran canasta con galletitas para vender. Le escuché decir que en el centro de rehabilitación donde vive no recibe ayuda de ningún político, y nos pusimos a charlar. Me contó que él tuvo problemas de adicción y que ahora está rehabilitado, pero sigue viviendo en el Centro donde se pudo recuperar. Como muchos otros compañeros, sale todos los días a vender galletitas, alfajores y facturas que ellos mismos cocinan para colaborar con el lugar. Ellos ponen mucho esfuerzo para salir adelante y no reciben la ayuda que necesitan, por eso no me sorprendió que esté descreído de los políticos", relató Vidal.
La candidata prosiguió: "En la provincia necesitamos crear más centros de prevención donde las madres puedan llevar a sus hijos, y sobre todo una red de contención para los adictos y sus familiares. Antes de despedirme le compré a Julio (todos lo conocen como «el santiagueño») unas galletitas y le prometí que voy a visitar el lugar donde hizo su rehabilitación. Yo no le voy a fallar".
Días atrás Vidal fue cuestionada por Cristina Kirchner por "vestirse de lluvia" e ir a hacer política durante las inundaciones en Luján. Ahora, la mujer fuerte del PRO se volvió a mostrar junto a personas humildes, esta vez arriba de uno de los trenes más populares de Buenos Aires.