El Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a bendecir el rumbo económico del gobierno de Javier Milei. En su comunicado oficial, el organismo destacó el "progreso excepcional" de las metas pactadas y aprobó el desembolso de 800 millones de dólares tras la octava revisión del acuerdo de facilidades extendidas. Desde el gobierno celebraron el gesto como un “respaldo clave” a su plan de ajuste.(
Según el FMI, el plan económico libertario “está corrigiendo desequilibrios profundos y restaurando la estabilidad”, aunque reconoció que la situación sigue siendo “difícil”. No obstante, lejos de poner el foco en el impacto social del recorte, el organismo elogió las medidas de Milei como “audaces”, incluyendo la fuerte contracción del gasto público, la liberalización de precios y la apertura comercial.
En paralelo, el informe también validó la decisión de mantener el ancla fiscal y monetaria, lo que en la práctica implica la continuidad de una política que licúa jubilaciones, congela salarios públicos y asfixia la inversión estatal. La promesa de una inflación en baja no alcanza a ocultar que el propio Fondo prevé una caída del PBI de 2,8% para este año, junto a un aumento del desempleo y una pobreza estructural que ya afecta a más de la mitad de la población.
Los elogios del FMI se conocieron en el mismo día en que organizaciones sindicales y movimientos sociales volvieron a las calles para denunciar “un ajuste sin alma” que, bajo el paraguas del aval internacional, profundiza la recesión y deja al Estado ausente frente a las necesidades básicas de millones. Para el Fondo, sin embargo, el camino es “valiente y necesario”. Para el pueblo, es hambre. .