09.04.2025 / CONGRESO
Marcha de los jubilados y la CGT: otra vez, fuerte operativo policial
El operativo de seguridad protagonizado por 700 agentes nacionales es uno de los puntos más polémicos de la jornada. En medio de la manifestación, surgió un enfrentamiento judicial entre el Gobierno y el juez Roberto Gallardo, quien prohibió a las fuerzas federales intervenir en el operativo de seguridad.
Con un fuerte operativo policial, las primeras columnas de manifestantes comenzaron a llegar al Congreso en la previa del paro general convocado por la CGT. En esta oportunidad, los jubilados, que marchan habitualmente todos los miércoles en reclamo de aumentos en sus haberes, se sumaron a la central obrera y a las dos CTA, quienes también se unieron a la manifestación. La CGT, en su comunicado, expresó que sus reclamos incluyen la demanda de paritarias libres, la homologación de todos los convenios colectivos de trabajo, un aumento de emergencia para todas las jubilaciones y pensiones, la actualización del bono y el fin de la represión en las protestas sociales.
El operativo de seguridad es uno de los puntos más polémicos de la jornada: hay 700 agentes. En medio de la manifestación, surgió un enfrentamiento judicial entre el Gobierno y el juez Roberto Gallardo, quien prohibió a las fuerzas federales intervenir en el operativo de seguridad. Gallardo determinó que la responsabilidad de la seguridad recaía en el Gobierno porteño, decisión que fue apelada por el Ministerio de Seguridad, que acusó al magistrado de vulnerar la división de poderes al emitir un fallo basado en hechos hipotéticos y sin un caso judicial concreto que lo justificara. La Cámara de Apelaciones y el Ministerio Público Fiscal habían dictaminado que solo la Justicia federal podía intervenir en casos que involucraran a fuerzas federales.
La manifestación de hoy también estuvo marcada por la violencia en las marchas anteriores. Durante una protesta el 12 de marzo, las fuerzas de seguridad reprimieron brutalmente a los manifestantes, dejando heridos y detenidos, lo que provocó un gran malestar en la población. En esta oportunidad, el Gobierno parece haber optado por un dispositivo de seguridad más riguroso para evitar enfrentamientos y disturbios.
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