La industria pyme sigue atravesando un contexto de retracción, con una caída del 3,7% en la actividad manufacturera durante noviembre, acumulando una disminución del 13,6% en los primeros once meses del año respecto al mismo período de 2023. Si bien el panorama general es negativo, se observan algunas mejoras mensuales: en noviembre, la actividad industrial creció un 3,9% en comparación con octubre, y el uso de la capacidad instalada se incrementó del 62,3% en octubre al 63,1% en noviembre, según informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
En términos sectoriales, el panorama es dispar. En la comparación anual, dos de los seis sectores manufactureros relevados registraron incrementos: "Madera y muebles" creció un 6,4%, mientras que "Textil e indumentaria" subió un 1,7%. Sin embargo, los sectores más golpeados fueron los de "Químicos y plásticos", con una caída del 17%, "Papel e impresiones", con una retracción del 15,7%, y "Alimentos y bebidas", que retrocedió un 15%. En el acumulado anual, todos los sectores experimentaron descensos.
A pesar de los números negativos en comparación con el año pasado, algunos sectores han logrado mejorar sus índices de producción en noviembre. Por ejemplo, el sector de "Alimentos y bebidas" registró una mejora del 3,7% en la comparación mensual, mientras que "Metal, maquinaria y equipo, y material de transporte" creció un 3,3% frente a octubre. Sin embargo, la caída acumulada de estos sectores sigue siendo significativa, con descensos de 15% y 13,8% respectivamente en el período enero-noviembre.
Cabe señalar que, de acuerdo a Ámbito, las pymes continúan expresando sus principales preocupaciones y demandas. La principal medida solicitada sigue siendo la reducción de impuestos y tasas municipales, una demanda que alcanza al 61,8% de las respuestas en una encuesta realizada por CAME. Además, el estímulo a la demanda interna y la generación de incentivos para la contratación de personal se destacan como otras medidas urgentes para mejorar la situación del sector. Sin embargo, el panorama sigue siendo complicado y la recuperación de la industria pyme aún se muestra incierta.