El ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de la provincia de Buenos Aires, Gabriel Katopodis, apuntó con dureza contra el presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, asegurando que la pobreza ha aumentado bajo su gestión debido a “su desastroso plan económico” y a la “paralización total de la obra pública”. Según Katopodis, las políticas de Milei y Caputo no solo han tenido un impacto negativo en la economía, sino que también han deteriorado el acceso a servicios esenciales, como el agua potable y el saneamiento.
Desde X, Katopodis manifestó sus inquietudes sobre el hecho de que el presidente de AySA, Marcelo Papandrea, haya "ratificado" los planes de privatizar la empresa estatal, una decisión que el ministro calificó de “mala idea sanitaria, económica y social”. Recordó que en el pasado, cuando se intentó privatizar la empresa, la situación resultó en un desastre: "Quebraron y fundieron una empresa que es social, que debe garantizar el acceso a un derecho básico universal". Según Katopodis, la privatización resultó en años sin obras, con créditos solicitados que nunca fueron utilizados para inversiones y una red de saneamiento que no se amplió.
El ministro también subrayó que durante la gestión anterior de Malena Galmarini al frente de AySA, 1.8 millones de personas accedieron al agua potable y 1.3 millones a cloacas. Además, se terminaron 1.800 obras y quedaron 300 en ejecución, aunque actualmente estas se encuentran paralizadas debido a las políticas del nuevo gobierno. Entre las obras inconclusas se mencionan proyectos clave como el Sistema Riachuelo, el Sistema Berazategui, el Sistema Agua Norte y el Agua Sur.
Katopodis también denunció la falta de acción del gobierno nacional en el Conurbano bonaerense, describiéndolo como un “campo minado de obras paradas a cielo abierto”, lo que aumenta la inseguridad y desperdicia la inversión ya realizada. "La ecuación es ruinosa por donde se la mire", señaló el ministro, quien añadió que el gobierno no solo ha paralizado las obras, sino que también ha incrementado las tarifas a niveles "altísimos", lo que agrava aún más la situación de los habitantes de las regiones más desfavorecidas.
