La reforma laboral que el gobierno de Javier Milei pretende impulsar para el año 2025 generó fuerte preocupación en el ámbito laboral entre sindicatos y organizaciones sociales. Tal como detalló una publicación de Tiempo Argentino, las propuestas del oficialismo apuntan a modificar profundamente las normativas laborales del país, afectando derechos fundamentales de los trabajadores. Entre las modificaciones más polémicas, se destaca el cuestionamiento del concepto de “irrenunciabilidad”, un principio clave que garantiza que los derechos de los trabajadores no pueden ser renunciados por voluntad propia.
El presidente Milei, en su discurso de celebración por el primer año de gestión, dejó en claro que su gobierno planea “poner sobre la mesa una agenda de reformas profundas”. En este sentido, entre las iniciativas más destacadas, el mandatario mencionó la intención de llevar adelante una “verdadera reforma laboral”. Sin embargo, más allá de su retórica, lo que realmente se busca es flexibilizar aún más las condiciones laborales, con mecanismos que favorecen principalmente a las patronales. La reforma facilitaría la implementación de “cambios irracionales” en las modalidades de empleo, adaptando las condiciones laborales a las demandas de la productividad empresarial.
Cabe señalar que uno de los aspectos más criticados por los sectores sindicales es la eliminación de la irrenunciabilidad, la cual se complementa con propuestas como la implementación de la multitarea y el banco de horas. Estas medidas permitirían a los empleadores aumentar la carga horaria de los trabajadores sin una compensación adecuada, y aún más, modificar el horario de trabajo según las necesidades de la empresa. Según los expertos, este tipo de reformas pone en riesgo la estabilidad y los derechos laborales alcanzados a lo largo de décadas de lucha.
El gobierno de Milei no se detiene en sus propuestas, y ya cuenta con un proyecto presentado en la Cámara de Diputados por la legisladora oficialista
Romina Diez. La iniciativa cuenta con el apoyo de una decena de legisladores de la bancada de La Libertad Avanza y con el respaldo del secretario de Trabajo,
Julio Cordero. A pesar de la resistencia de los sindicatos, que han logrado frenar temporalmente algunos puntos de la reforma a través de medidas cautelares, el gobierno parece decidido a avanzar con su agenda de cambios laborales, lo que podría tener un impacto negativo sobre las condiciones de vida y trabajo de millones de argentinos.
