El presidente Javier Milei culminó su gira por Italia con un encuentro clave en Roma con el titular de Stellantis y Ferrari, John Elkann. Esta reunión forma parte de un recorrido que incluyó varias actividades de alto perfil. Elkann, quien además preside Exor, el conglomerado que controla la Juventus y los principales diarios italianos como "La Stampa" y "La Repubblica", recibió al mandatario argentino en un contexto en el que las relaciones empresariales y las inversiones internacionales fueron protagonistas. Aunque los detalles del encuentro no fueron revelados, una fotografía de ambos inmortalizó el momento.
Tras el encuentro con Elkann,
Milei participó en una entrevista exclusiva con el diario italiano "Libero", conocido por sus portadas provocadoras. Publicado en Milán, este periódico fue el escenario en el que el presidente argentino compartió su visión política y económica. El mandatario fue recibido por los periodistas de la publicación, entre ellos Mario Sechi, con quien se fotografió para dejar constancia de su visita, que refuerza la conexión mediática entre el gobierno argentino y la prensa italiana.
Desde el Gobierno enfatizaron que la visita de Milei a Italia, realizada a pedido de la primera ministra Giorgia Meloni, fue una oportunidad para consolidar lazos políticos y económicos. Durante su estadía, además de la reunión con Elkann, el presidente participó del Festival Juvenil Fratelli d'Italia Atreju en el emblemático Circus Máximus. En este evento, Milei destacó su visión crítica al Estado, reafirmando su postura de reducirlo y “destruirlo” como parte de su agenda política. “Contra todos los pronósticos de los analistas y políticos profesionales, creían que íbamos a durar tan solo un par de meses”, manifestó, subrayando que su gobierno ha desafiado las expectativas de la clase política tradicional.
Cabe señalar que un gesto simbólico de la visita fue la entrega de la ciudadanía italiana a Milei y su hermana, un acto que generó una notable controversia. Mientras que la derecha italiana lo recibió con entusiasmo, la izquierda expresó su descontento, interpretando este gesto como una provocación política. En sus declaraciones, Milei resaltó los fuertes lazos históricos entre Argentina e Italia, haciendo hincapié en la importancia de los vínculos entre ambos pueblos: “Los argentinos y los italianos estamos unidos por un linaje común y lazos de sangre profundos que datan de varias generaciones. Por eso, más que estar entre amigos, siento que estoy en familia”, afirmó.