Luego de reunirse con empresarios del sector, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, confirmó este martes el avance de la privatización de la Hidrovía en la sede de la Administración General de Puertos, en Puerto Madero.
La licitación de la "Vía Navegable Troncal" será llevada adelante por la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, que conduce Iñaki Arreseygor, y recibirá ofertas hasta el 29 de enero del 2025, aunque ya habría propuestas de al menos seis compañías, principalmente de China, Bélgica y Holanda. Según lo establecido, estaría fuera del Estado por 30 años.
Puntualmente, el acuerdo implica “la modernización, ampliación, operación y mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado, redragado y mantenimiento" de la Vía Navegable Troncal comprendida entre el kilómetro 1238 del Río Paraná, punto denominado Confluencia, hasta la Zona de Aguas Profundas Naturales, en el Río de la Plata exterior, hasta la altura del kilómetro 239,1 del canal Punta Indio, por la vía del Canal Ingeniero Emilio Mitre y el Río Paraná de las Palmas, Río Paraná Bravo, Río Paraná Guazú, Río Talavera, Río Paraná–Océano Atlántico.
Las autoridades nacionales detallaron que, entre otras medidas, se sumarán bases con radares y sistemas satelitales de seguimiento de los buques, además de que se renovará totalmente la señalización, generando una navegación más segura, y se aumentarán las instancias de control para la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo.
Sobre este último punto, la compañía elegida estará obligada a implementar un sistema de “iluminación” de la vía, mediante drones y comunicación satelital, para hacer seguimiento de todos los barcos que circulan por allí. También se harán cargo de los costos de las inspecciones, que seguirán en manos del Gobierno.
Además, señalaron que el futuro concesionario de la red, que atraviesa las provincias de Buenos Aires, Chaco, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Misiones y Santa Fe, deberá cumplir, a riesgo propio y sin intervención del Estado, con el plan de obras establecido en los pliegos de la licitación y el nuevo contrato, que determina las etapas de trabajos prioritarias que se tendrán que realizar en los primeros cinco años.
Se realizará una profundización a 39 pies, con una primera etapa de unificación de profundidades en el tramo Timbúes-Océano, y también se contemplan métodos dinámicos para establecer nuevas profundidades (+ de 39), así como nuevas zonas de fondeo y sobrepaso, en cualquier momento del contrato.