17.11.2024 / CASA ROSADA

De qué hablaron Javier Milei y Emmanuel Macron en Casa Rosada

El presidente francés, que ya había visitado Buenos Aires durante el G20 en 2018, partirá esta misma tarde hacia Brasil, donde participará en el foro del G20. Allí coincidirá nuevamente con Milei, aunque no se espera una reunión formal con el presidente anfitrión, Luiz Inácio Lula Da Silva, con quien el líder libertario mantiene diferencias ideológicas marcadas.





El presidente Javier Milei recibió este domingo en la Casa Rosada a su par francés, Emmanuel Macron, con quien mantuvo un encuentro privado que se extendió por poco más de una hora. Este encuentro marca un hito en las relaciones bilaterales, en el marco de la visita del mandatario galo, quien arribó al país acompañado de su esposa, Brigitte Macron. Tras la reunión, ambos presidentes saludaron desde el emblemático balcón de la Casa de Gobierno a un grupo de ciudadanos que los esperaban bajo una persistente lluvia.

La jornada de Macron comenzó temprano, con un homenaje en la Iglesia de la Santa Cruz a las víctimas de la última dictadura militar, entre ellas las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet. Luego, realizó una ofrenda floral en la Plaza San Martín en honor al libertador argentino, símbolo de los lazos históricos entre Argentina y Francia, país donde San Martín vivió los últimos años de su vida.

Durante el encuentro en la Rosada, Macron y Milei abordaron temas de interés común en una reunión que también contó con la presencia de la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y de los ministros Gerardo Werthein (Relaciones Exteriores) y Luis Petri (Defensa). A continuación, Macron sostuvo una entrevista con inversores argentinos, con el objetivo de fortalecer las relaciones económicas entre ambos países.

Esta reunión también fue significativa para el canciller Gerardo Werthein, quien asumió recientemente y tiene en este mitin bilateral su primera prueba diplomática de alto nivel. El encuentro refuerza la visión de ambos países de mantener una relación respetuosa a pesar de las divergencias ideológicas, impulsada en gran parte por la labor del embajador argentino en París, Ian Sielecki.