En los primeros nueve meses del año
el consumo de carne vacuna cayó un 12,3% con relación a igual período del año anterior, según relevó la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA). Especifícamente en septiembre el consumo fue de 47,5 kilos pér cápita un 10,9% menos que en el mismo mes del año pasado, en ese momento 5,8 kilos menos per cápita.
La baja, que equivale a 46,8 kilos promedio al año, es una caída de 6,6 kg por habitante al año. Entre los factores, además de la caída de ingresos y la suba de precios, se suma que ya no hay plan de financiación en cuotas sin interés, como por ejemplo ofrecía una cadena de supermercados el año pasado.
De acuerdo a CICCRA,
casi un 80% de los argentinos ya no se reúne con amigos y familia para hacer asados, y los encuentros que sí se realizan son cada vez más espaciados.
El informe señala que el 70,5% del total de la carne vacuna producida en la Argentina en los primeros nueve meses de 2024, se destinó al mercado interno y que, en términos absolutos,
la caída del consumo interno habría sido de 209,8 mil toneladas. Al colocarlo en la perspectiva “histórica”, se observa que fue el más bajo de los últimos 26 años.
Especifícamente en el período enero hasta septiembre de 2024, se produjeron en la Argentina 2,336 millones de toneladas res con hueso de carne vacuna, lo que representó una caída de 6,4% con igual período de 2023. En términos absolutos, la retracción de la cantidad ofrecida de carne vacuna fue de 159,8 mil toneladas.