A Milei pareciera ser que no le importa que los argentinos tomen mate. Es que el consumo de yerba mate en nuestro país experimentó una caída impresionante en lo que va del año, con una disminución del 9,5% en la demanda.
El consumo de yerba mate en Argentina ha experimentado una caída importante en lo que va del año, con una disminución del 9,5% en la demanda. Según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), entre enero y septiembre se consumieron 193.400 toneladas de yerba, en comparación con las 211.913 toneladas del mismo período del año anterior. Esta baja en el consumo se suma a otras tendencias preocupantes en el ámbito alimentario, como la reciente caída del 17,1% en la compra de carne vacuna.
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De acuerdo a la información de DataClave, a pesar de esta merma en el consumo interno, el mercado de exportación ha mostrado un desempeño opuesto. Durante el mismo período, las exportaciones de yerba mate crecieron un 9%, alcanzando un incremento de 2.678 toneladas respecto al año anterior. El INYM estima que, si se mantienen los niveles de embarque, las exportaciones podrían cerrar el año en aproximadamente 42.000 toneladas.
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Un cambio notable en las preferencias de los consumidores se ha dado en la presentación de los productos. Ha aumentado la elección de paquetes de medio kilo, que ahora representan el 56,53% del mercado, mientras que los paquetes de kilo, más económicos, han caído del 38,89% al 37,38%. Esta tendencia refleja la merma en el poder adquisitivo de los argentinos, quienes parecen optar por opciones más accesibles.
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Además, con una oferta récord de 968.057 toneladas de hoja verde ingresadas a los secaderos en los primeros nueve meses del año, el sector industrial ha visto cómo los precios han disminuido, incluso por debajo de los niveles del año pasado.
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